En relación con lo ocurrido, la Policía informó que a las 09:00 horas del viernes, vecinos de la referida dirección se comunicaron al sistema de emergencias 066 para reportar que salía un fétido olor de la casa marcada con el número 87 de la mencionada avenida.
Momentos después, agentes de la Policía del Mando Único llegaron al sitio y entrevistaron a los denunciantes; uno de ellos les permitió el acceso a su propiedad para que se asomaran e investigaran qué había pasado.
Los uniformados se dieron cuenta que había manchas de sangre y que el olor que se percibía era porque había dos personas muertas.
Por ello, a los pocos minutos arribó personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) para dar inicio a las investigaciones de este hecho.
Al entrar a la morada, en la cocina, los peritos encontraron a un hombre de 35 años de edad, quien estaba muerto como consecuencia de un balazo en la cabeza.
Por otra parte, el padre de esta persona, de 65 años, se encontraba en una habitación de la casa.
Entre las evidencias que había era un arma de fuego calibre .32 y un mensaje.
En este sentido, las autoridades informaron que, presuntamente, el hombre de 35 años de edad asesinó a su padre y después decidió suicidarse.
Posteriormente, personal del Servicio Médico Forense (Semefo) realizó el levantamiento de los hombres, quienes se llamaban Eduardo de León Arteaga, de 65 años, y su hijo Paulino de León, de 35, de acuerdo con datos proporcionados por los vecinos.