Quedó claro el día de ayer que el partido Verde Ecologista sabe jugar en el tablero político liderado por Morena. Esto a pesar de contar con una representación minúscula y después de haber roto con su partido padre durante décadas, el PRI. Los Verdes llegaron al senado mexicano con la intención de manipular la agenda y lo lograron.
En un movimiento interesante, Morena y su mayoría de senadores les concedió el capricho de regresar a Manuel Velasco a la gubernatura de Chiapas, gracias a una alteración en la constitución chiapaneca y a una segunda y polémica votación para forzar a que el único gobernador del Verde cumpliera su capricho de ser gobernador-senador. Morena aceptó un acuerdo con este pequeño partido a cambio de cinco diputados verdes que ahora jugarán en el equipo de Morena.
El acuerdo generó opiniones críticas para Morena y su cuarta transformación. Y es que en redes sociales se viralizó un video en donde Ricardo Monreal, coordinador de los senadores de Morena, hablaba bastante bien de la intención de Velasco por hacerse con esa licencia en la que tanto insistió. No se alcanzaba a comprender el porqué de Monreal y su partido para votar de nuevo por un tema que ya había sido rechazado en un inicio. Varios medios compartimos la decisión como histórica, en donde Morena habría pujado para negar una licencia por primera vez en el senado nacional.
Después del llamado de Monreal, la bancada morenista, en su mayoría, votó a favor de cumplir el capricho Velasco. El acuerdo, se supo horas después, le otorgaba a Morena cinco diputados verdes en la cámara baja. Con esto, Morena amarró una estrategia interesante en donde pasaron de ser mayoría representativa a mayoría absoluta. La tirada del partido guinda siempre fue la de conseguir un número de diputados suficientepara no requerir de alianzas con otros partidos a la hora de impulsar y aprobar leyes en la cámara de diputados.
Armando Guadiana, senador de MORENA, se pronunció en contra de la licencia a Manuel Velasco: "Es una vergüenza, yo si fuera gobernador de mi estado, pedir licencia para ser senador y luego regreso para acabar con una encomienda, me sería vergonzoso" pic.twitter.com/9dLL86VwU1
— Megáfono (@Megafono_Mx) 4 de septiembre de 2018
Hace algunos días el partido Verde, en donde Velasco es uno de sus principales perfiles, aseguró que se divorciaban del priísmo nacional. Con esto, su vocero oficial dejó en claro que ahora el Verde sería un partido independiente, con capacidad de planeación individual y sin ataduras a ningún interés político que no sea el ecológico. Al día siguiente, el famoso Emilio González, declaró que su partido ecologista estaría al servicio de los intereses de López Obrador.
Queda claro que ahora el partido ideal para adherirse a intereses de otros partidos más fuertes ha dejado completamente al PRI y se ha unido, también completamente, a Morena y sus mayorías legislativas. ¿Quién sale ganando en el acuerdo? Pareciera que el capricho de Velasco por regresar a gobernar Chiapas por tres meses es un asunto demasiado pequeño como para regalar cinco diputaciones a los morenistas, pero detrás puede haber intereses verdes de por medio. En principio, asegurarle una transición a modo a Velasco, ahora que ingresará el nuevo gobernador morenista en Chiapas, Rutilio Escandón.
Para Morena, los cinco diputados le han salido demasiado baratos. Con tan solo cumplir un capricho menor del partido Verde que durará tres meses, los guindas han asegurado una mayoría absoluta de 252 diputados de Morena. Esta acción beneficia a los guindas por al menos cinco años. Y es que el Verde tenía 16 diputados, con los que después del cambio de bandera, quedarían con once diputados “ecologistas”, un número igual de minúsculo que al principio.
Como resumen del pacto, el Verde deja ver su buena capacidad para negociar (a cambio de vender representantes sin valor institucional alguno). Además, Morena mostró su capacidad para generar acuerdos con partidos tradicionales de derecha y su hambre por hacerse de todo el poder posible en ambas cámaras legislativas. Por último, y lo más importante, la población de Chiapas que exigía el no regreso de Velasco fue totalmente ignorada por un acuerdo inédito que mancha la imagen de Morena en el primer día de labores en la 53 legislatura.