Pasaron meses sin que se supiera de Ricardo Anaya. Minutos después de anunciar su derrota en la búsqueda por la presidencia de México, del queretano no se supo nada hasta que apareció jurando que se alejaría de la vida política nacional y que buscaría algún puesto de maestro en Estados Unidos, un país en donde le ha gustado vivir durante años. Ahora, Anaya Cortés ha cambiado de discurso.
Según señalamientos del medio La Política Online, el panista estaría viendo sus posibilidades en México para regresar a contender por el cargo de gobernador de Querétaro. Es importante señalar que este estado, junto con Puebla y Guanajuato son los bastiones más importantes del partido católico. Gobernado por Miguel Márquez, el estado clave en la historia independentista del país siempre ha preferido a los candidatos azules.
Con esta premisa, Ricardo Anaya podría volver a México para permanecer vigente durante el sexenio de López Obrador. Según declaraciones de personas cercanas al queretano, el golpe electoral que recibió el primero de julio fue tan grande que Anaya no quería saber nada más de la política nacional durante el próximo gobierno. Las noticias de su regreso ponen en jaque a los panistas que aspiran por controlar la presidencia del partido.
En cuanto se supo de Anaya después de su derrota en segundo lugar nacional, el queretano también argumentó que no pretendía regresar al cargo de presidente de Acción Nacional. Con esto, quitaba su rostro del partido pero no su influencia, ya que en la pelea actual por controlar el partido conservador hay varios políticos amigos suyos a la cabeza. El regreso de Anaya al escenario político nacional podría mostrar su interés por seguir controlando buena parte del partido en general. Recordemos que Anaya tiene un serio pleito con Felipe Calderón y los calderonistas.
Para 2012, México tendrá votaciones intermedias en donde se disputarán territorios claves, entre ellos Monterrey y Querétaro. En ambas vacantes, Acción Nacional quiere figurar como favorito, después de la enorme convocatoria de Morena a nivel nacional. Anaya siempre ha querido gobernar su tierra, pero sus intentos por conseguir la preferencia de los votantes mexicanos lo mantiene con el récord de cero victorias en las urnas.
Pero su regreso es bastante difícil. Anaya mantiene aún una investigación por lavado de dinero por la venta de una nave comercial en Querétaro, el lugar en donde pretende gobernar. Su angustia por ponerle fin a esta pesquisa lo han orillado a acercarse a López Obrador para tomarse la foto de la reunión entre estos dos rivales políticos. Para el queretano, no hay nada ilegal en esa venta y todo fue una estrategia del gobierno de Enrique Peña para debilitar su ascenso político.
Otro gran problema es que Anaya necesita tiempo para que la militancia panista le perdone la enorme división que generó al insertarse en el puesto de candidato presidencial sin consultarlos. Y es que el trabajo del queretano en el partido católico no fue bien ejercido, ya que Acción Nacional registró un número de votos tan bajo como en los años ochenta. Con esto, la elección de Anaya para la candidatura de Querétaro en el 2021 podría ser realmente complicada.
Con información de LPO.