El exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, declaró que fue la “caja china” del gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto para ocultar todos los escándalos, como la llamada ‘Casa Blanca’, y el caso de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa.
En entrevista para Televisa, el exfuncionario explicó que Peña Nieto compró esa estrategia de que la única forma de “lavarse la cara” era meter a alguien de los suyos a la cárcel.
“Tenían como estrategia, y la compró el presidente Peña Nieto, que la única forma de lavarse la cara, de que no lo acusaran como corrupto, era meter a alguien de los suyos a la cárcel. Era el gobernador priista más sacrificable”, dijo en la conversación con el medio.
Duarte de Ochoa fue detenido en Guatemala y extraditado a México acusado de los delitos de lavado de dinero, peculado, coalición, desvío de recursos y delincuencia organizada. Este último, que era el delito más grave que se le imputó, fue reclasificado por asociación delictuosa.
De hecho, solo se le declaró culpable por lavado de dinero y asociación delictuosa y el 26 de septiembre de 2018 se le dictó una sentencia de nueve años de prisión, multa de 58 mil pesos, y el aseguramiento de 41 bienes inmuebles.