El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este martes que la toma de instalaciones en la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) ya se convirtió en un asunto político.
“Existe una demanda justa de que se atienda una necesidad, pero ya se convirtió en un asunto político abrazado por el conservadurismo”, dijo durante su conferencia matutina desde Palacio Nacional.
El presidente señaló que estas protestas tienen mucha difusión porque la prensa conservadora y los medios de comunicación las magnifica para perjudicar a su gobierno.
“Hay mucho encono, coraje, en contra de Rosario Piedra, sobre todo de los grupos conservadores, por la mamá, por doña Rosario y por el hermano desaparecido”, agregó.
“Fíjense cómo son las cosas, el conservadurismo no quería, el partido más conservador del Congreso, por consigna de quienes tienen diferencias con doña Rosario, no querían que Rosario Piedra quedara como presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, hicieron todo”, dijo el presidente.
Puntualizó que es un asunto que viene de tiempo atrás y que ahora que se da esta situación se le da mucho espacio y tiempo. Señaló que se está utilizando este caso.
“Hay una exageración en todo sentido y vuelvo a decir lo mismo, yo no creo en la violencia, yo creo en la no violencia, no creo que la violencia deba enfrentarse con violencia, el mal hay que combatirlo con el bien”.
Explicó que la Secretaría de Gobernación (Segob) está abierta al diálogo con las personas que tienen tomadas las instalaciones de la CNDH.
“No hay que olvidar que los extremos se tocan, la extrema izquierda y la extrema derecha”, sentenció y recordó que para triunfar tuvo que enfrentar a extremistas de izquierda.