El presidente Andrés Manuel López Obrador descartó este viernes que el caso de Salvador Cienfuegos sea impedimento para que continúe siendo asesor de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Al ser cuestionado sobre si la investigación hecha por la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) debería significar un impedimento para que el general Cienfuegos continúe siendo asesor, contestó que no.
"No, de ninguna manera. Porque el expediente, ya ha quedado demostrado, lo fabricaron. Esto les molesta mucho a nuestros adversarios, pero es la realidad. La verdad nos hará libres", comentó en su conferencia matutina.
López Obrador explicó que, de acuerdo con los ordenamientos legales, los exsecretarios de la dependencia pasan a ser parte de un equipo de asesoría del titular en turno.
Al respecto, el general secretario Luis Cresencio Sandoval detalló la situación: "Dentro de los reglamentos en la institución se establece que los secretarios de la Defensa pasan a ser parte del grupo de asesores del secretario en turno. No quiere decir que se tenga que consultar siempre y que esté en la secretaría, sino que en caso de que se requiera, que el secretario en turno quiera comentar con ellos algo o pedir su opinión sobre alguna circunstancia que se esté presentando en el país se puede uno reunir".
Sandoval indicó que los exsecretarios de la Sedena ganan "igual que todos los retirados (...) siguen percibiendo su sueldo como retirados. Sí siguen ganando dentro de lo que es el erario federal, pero los únicos que tienen esa característica de designarse como asesores son los exsecretarios".
En este sentido, Salvador Cienfuegos se mantiene activo en el Gobierno de AMLO. Desde el 1 de diciembre de 2018, horas después de que dejó la titularidad de la Sedena, se convirtió en automático en asesor de élite del actual titular Sandoval.
Cienfuegos en ningún momento dejó de ser asesor del actual titular del Ejército, por lo que también lo era cuando fue detenido en Estados Unidos, el pasado 15 de octubre de 2020, cuando fue acusado de narcotráfico y lavado de dinero.
El Gobierno estadounidense retiró los cargos contra el general el 18 de octubre de 2020, con el fin de que fuera investigado en México. En tanto, el 14 de enero de 2021, la Fiscalía General de la República (FGR) decidió no ejercer acción penal en contra del general Salvador Cienfuegos.