¿Otro caso de brutalidad policiaca? La tarde del 9 de junio pasado, la medica Beatriz Hernández Ruiz sufrió un accidente automovilístico en el municipio de Progreso de Obregón, estado de Hidalgo. Al lugar llegaron policías municipales y la arrestaron.
En redes sociales se difundió el video grabado por testigos y amigos de la doctora para exponer el trato que le estaban dando a la mujer a pesar de que acababa de sufrir un accidente. En las imágenes puede observarse que una policía la toma por el cuello e intenta meterla a la patrulla a pesar de que ella no quiere.
“No me importa, yo estoy haciendo mi trabajo”, se escucha decir a la policía.
Unas horas después de ser ingresada a las celdas de detención primaria del municipio, Beatriz murió.
Familiares y amigos de Beatriz han levantado la voz en redes sociales y en las instalaciones de la Procuraduría de Hidalgo para que se haga justicia y que se investigue la brutalidad policiaca y uso excesivo de la fuerza que, afirman, se aplicó en ella para provocarle la muerte.
Su hermano publicó en redes sociales la lucha para que todo se investigue bajo el protocolo de feminicidio.
La Procuraduría ya inició la carpeta de investigación por feminicidio y explicó que ayer recibió la notificación de una clínica en el municipio en la que se informaba del ingreso de una persona sin signos vitales. Esta persona anteriormente había estado en el área de retención primaria.
El asunto es que las autoridades de Progreso de Obregón dicen que no tienen nada que ver…
Por medio de un comunicado publicado en sus redes sociales, el gobierno municipal asegura que una mujer fue ingresada al área de retención, después de ser certificada por un perito, que se le atribuyeron características atribuibles al uso de sustancias y que después fue visitada por su padre, quien la acompañó por un tiempo.
“Posteriormente fue encontrada suspendida con un objeto en el cuello, por lo que el gobierno municipal desplegó las acciones oportunas para evitar lesiones y por lo cual fue transferida al Hospital más cercano en el cual se comunicó ya no contaba con vida“, dicen.
Lógicamente esta versión es rechazada por su familia, amigos y testigos del accidente ya que, aseguran, cuando se la llevaron en la patrulla no estaba en condiciones graves como para perder la vida.