Luego de que se diera a conocer que la internacionalista mexicana Paola Schietekat Sedas fue condenada en Qatar a 100 latigazos y siete años de cárcel, tras denunciar el abuso sexual que sufrió mientras trabajaba para el Comité Organizador del Mundial de Futbol que comenzará el próximo 21 de noviembre, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) se pronunció al respecto.
Fue el canciller Marcelo Ebrard Casaubon quien informó la tarde de este viernes a través de su cuenta de Twitter que sostuvo una reunión con Schietekat Sedas, a quien calificó como una mujer valiente, para asegurarle que el Gobierno de México la defenderá jurídicamente.
"Agradecí a Paola su visita y la conversación. El Consultor Jurídico de la SRE, nuestro mejor abogado, se hará cargo de defenderla y de que sean respetados todos sus derechos como ciudadana mexicana. Le reconocí su valentía y resolución”, dijo el canciller.
Cabe mencionar que el pasado 16 de febrero, la joven intelectual señaló en su cuenta de Twitter la inacción de la Embajada de México en Doha, pues aseguró una falta de un protocolo de protección a víctimas de violencia con perspectiva de género en el Servicio Exterior Mexicano.
Incluso, dijo que nadie de las y los diplomáticos hablaba ni un poco de árabe y que tampoco tenían el menor conocimiento de las leyes locales.
Los hechos ocurrieron el 6 de junio del año 2021, pero fueron dados a conocer por Schietekat Sedas en un artículo reciente en el que narró con detalles la violencia a la que fue sometida.
Al haber estudiado Relaciones Internacionales, Ciencias de la Conducta, Antropología y Políticas Públicas en México y en el extranjero, en universidades en Kuwait y en Oxford, fue contratada como economista conductual en el Comité Organizador del Mundial (COM).
Todo cambió esa noche, cuando un conocido que consideraba su amigo y que pertenece a la comunidad latina en Doha, se metió a su departamento mientras ella dormía.
“Después de un forcejeo breve, pues su fuerza sobrepasaba la mía, terminé en el piso. Horas después, me salieron moretones en todo el brazo izquierdo, el hombro y la espalda. Mantuve la cabeza fría: le avisé a mi mamá, a un colega del trabajo y documenté todo con fotos, para que mi memoria, en un intento de autoprotección, no minimizara los eventos o borrara por completo parte de ellos”. narra Paola.
Con el certificado médico que demostraba la agresión, acudió a denunciar a la policía junto con el Cónsul de México en Qatar, Luis Ancona. Más tarde, la convocaron de nuevo a la estación policial. La querían enfrentar con su agresor, quien aseguraba que eran novios y que ella había dado consentimiento para que él ingresara al departamento.
Fue ahí donde Paola pasó así de acusadora a acusada, pues en Qatar las relaciones extramatrimoniales son un delito, por lo que los policías habrían descartado el abuso.
La sentencia, que se dio a conocer en su ausencia, absolvió al agresor y a ella se le impuso la pena de 100 latigazos y siete años de prisión. Era culpable por haber tenido una relación extramarital. Para evadir la condena, su abogada se atrevió a recomendarle que se casara con el abusador. Schietekat Sedas sigue sin poder creerlo.
La pena no se concretó gracias a que la economista, con la ayuda del Comité Organizador del Mundial y de Human Rights Watch (HRW), logró salir de Doha, pero no puede volver a lo que califica como su “trabajo soñado”. Y lo considera una injusticia.