Enterradas en caminos de terracería y campos de diversos cultivos como el jitomate, en los últimos 15 días han sido localizados 250 minas, artefactos explosivos que fueron desactivados por un grupo de respuesta de emergencias de la Brigada de Fusileros Paracaidistas, del Ejército Mexicano.
Con equipo especial los elementos castrenses realizaban un barrido por territorio de municipios como Aguililla, Michoacán, demarcación que el último año vivió el éxodo de población, y cierre de caminos cono derivado de la pugna de territorio entre bandas rivales del crimen organizado.
En la última semana dos minas estallaron una de ellas cobró la vida de una persona de la tercera edad, mientras su hijo se encuentra delicado debido a las lesiones que le ocasionó el artefacto explosivo.
Al respecto de la colocación de minas, el secretario de gobierno de Michoacán, Carlos Torres Piña reconoció que es un tema que preocupa, pero ya se ejecutan las acciones para detectarlas y no sean los ciudadanos de a pie los afectados.
Durante los barridos de los caminos el Ejército cuenta con equipo especial que emite señales de alerta y permite desactivar las minas, con trajes blindados con un peso de 55 kilos los oficiales se acercan a los explosivos y los desactivan.
Los equipos anti-minas continúan en operativos.