Sandra Cuevas retomó este viernes su cargo como alcaldesa de Cuauhtémoc, Ciudad de México, luego de haber estado suspendida por casi dos semanas con motivo del proceso judicial que se abrió en su contra por presuntamente haber cometido los delitos de robo, abuso de autoridad y discriminación en contra de tres mandos de la Policía Auxiliar de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
El jueves, Sandra Cuevas alcanzó un acuerdo reparatorio con las partes afectadas que implicó que pronunciara una disculpa pública, misma que hizo a su salida de los juzgados del Reclusorio Norte, aunque sin reconocer las conductas que se le imputaban.
Además, la funcionaria no tendrá permitido hablar del caso durante seis meses y por un periodo de tres meses tendrá que asistir a terapia psicológica para el control de ira.
Además, como parte del acuerdo reparatorio, la alcaldesa Sandra Cuevas Sandra Cuevas deberá pagar el costo de un radio de transmisión y de un teléfono celular, así como exhibir el pago de 30,000 pesos a cada una de las víctimas que la denunciaron, el cual debe solventarse el próximo lunes 28 de marzo.
Ayer, el vocero de la Fiscalía General de Justicia, Ulises Lara, aseguró que la dependencia Fiscalía no actuó “con criterios que sean contrarios a procurar la justicia” en el caso de Sandra Cuevas.
“Tajantemente señalamos que no existió ninguna implicación política ni ideológica en este proceso, solamente cumplimos con lo que la ley nos demanda, que es investigar los delitos”, dijo.
Por su parte la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, consideró que el haber alcanzado un acuerdo reparatorio entre la imputada, en este caso Sandra Cuevas, y la parte afectada, es decir, los tres mandos que presuntamente agravió la funcionario, demuestra que no hubo persecución política contra la alcaldesa de Cuauhtémoc, como lo acusó la oposición.
