Los decomisos de cocaína en México realizados por personal militar se desplomaron en los últimos cuatro años, a pesar de que el territorio continúa representando la principal ruta de tráfico de esta droga con destino a Estados Unidos desde Colombia, Perú y Bolivia.
Registros de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a los que obtuvo acceso El Financiero indican que las incautaciones de clorhidrato de cocaína por parte de personal militar disminuyeron 60 por ciento en los últimos cuatro años al pasar de los 10 mil 610 kilogramos en 2019 a los 6 mil 598 kg en 2022.
Desde 2018, cuando inició el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador, a la fecha, el Ejército ha decomisado 40 mil 287.144 kilogramos de cocaína, cantidad valuada en aproximadamente mil 128 millones 36 mil dólares en el mercado estadounidense.
Las entidades en las que se han realizados los decomisos más grandes son:
Nayarit - 2,302.296 kg.
Tamaulipas - 2,135.498 kg.
Ciudad de México - 1,284.2916 kg.
Sonora - 1,124.165 kg.
De acuerdo con el Doctor José Andrés Sumano, especialista en Políticas Pública, la baja en los decomisos de esta droga tiene su razón de ser en dos factores:
- Cambio en el consumo de los estadounidense y por ende un cambio en las prioridades de los cárteles del narcotráfico, y
- Que el Ejército está menos concentrado en los decomisos de droga.
“Las mismas organizaciones criminales han iniciado esa transición porque para ello es más rentable, distribuir y vender fentanilo que hacerlo con la cocaína y la marihuana (....) El Ejército está haciendo esfuerzos menores y está mucho menos concentrado en el tema de las drogas, ahora está concentrado en detener migrantes, no es la prioridad, y cuando se llega a hacer algo, se concentra en el tema del fentanilo”, refirió el especialista.
Cocaína colombiana en México
El Cártel de Sinaloa y el CJNG son los principales mayoristas en Estados Unidos de cocaína colombiana; sus alianzas con el Clan del Golfo son clave en el trasiego de esta droga a puertos mexicanos.
El Clan del Golfo, también llamado es considerado por el Departamento de Justicia de EU como “una de las organizaciones criminales más violentas y poderosas en Colombia, y uno de los mayores distribuidores de cocaína en el mundo”. Cuenta con más de 6 mil miembros y ejerce control militar sobre cantidades enormes de territorio en la región de Urabá en Antioquia, Colombia.
En mayo pasado, su líder Dairo Antonio Úsuga David, alias “Otoniel”, fue extraditado a EU. Desde 2003 y hasta 2021, Úsuga David fue líder de esta empresa criminal responsable de la exportación de múltiples toneladas desde Colombia a México y a Centroamérica para su importación final a EU.
El ‘Mono’, enlace entre México y Colombia
Reportes de la Fiscalía de Colombia refieren que Jorge Armando Montaño Duarte, alias ‘Mono’, identificado como cabecilla del Clan del Golfo y capturado en agosto pasado, fungía como el enlace entre la organización colombiana y los carteles mexicanos. Además, era receptor del dinero en efectivo, producto del contrabando de cocaína.
Su aliado, Henry Giraldo Giraldo, alias ‘Henry’, se encargaba de reclutar a las personas enviadas a territorio mexicano con el dinero. Este sujeto también es señalado de financiar los envíos de narcóticos al exterior.
De acuerdo con la Armada de Colombia, la célula liderada por ‘Mono’ tenía la capacidad de comercializar mensualmente hasta tres toneladas de clorhidrato de cocaína, avaluadas en más de 100 millones de dólares.