Un perro que llevaba una pierna humana en el hocico condujo al hallazgo de una mega fosa clandestina en Irapuato, donde hasta el momento han sido encontradas más de 50 bolsas con restos humanos.
Vecinos de la colonia Santa Fe de la ciudad guanajuatense dieron aviso a la policía municipal y al colectivo de búsqueda ‘Hasta Encontrarte’, lo que derivó en la localización del lugar, ubicado en las cercanías de un terreno baldío.
Agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) acudieron a la zona, donde iniciaron con los trabajos de exhumación de los restos que se encontraron en bolsas negras de plástico.
El hallazgo ocurrió el pasado viernes 28 de octubre. La FGE informó que las bolsas fueron encontradas en una calle de terracería, a un costado de la barda de las vías del ferrocarril, en el Fraccionamiento Santa Fe Segunda Sección.
“Se localizó un resto corpóreo (extremidad inferior) y dentro del predio bardeado con ladrillo rojo, se encontraron bolsas enterradas con olor fétido. Perito Criminalista procesa el lugar y se procede al traslado a SEMEFO para la práctica de la necropsia de ley”, dio a conocer el sábado.
De acuerdo con versiones periodísticas, una osamenta fue recuperada prácticamente completa y mostró huellas de haber sido incinerada recientemente. Se desconoce el número de cuerpos que contienen las bolsas.
De acuerdo con el colectivo “Hasta Encontrarte”, este lunes se encontraron 12 bolsas más con restos humanos, lo que significa un total de 53 bolsas. En un mensaje de Twitter, señaló el domingo: “Nos duele el alma, nos duele la muerte atroz, ahí están bajo tierra los resultados de la coordinación de los tres niveles de gobierno para regresar la paz a Guanajuato”.
La semana pasada, otro perro fue captado con una cabeza humana en el hocico mientras paseaba en el municipio de Monte Escobedo, Zacatecas.
De acuerdo con información oficial, la noche del miércoles pasado se registró el hallazgo de restos humanos así como de una mochila y dos cartulinas con el mensaje de un grupo delictivo.
Esto ocurrió en un cajero automático donde el perro encontró la cabeza, que posteriormente fue recuperada por autoridades de investigación que se encargaban de hacer el levantamiento de pruebas.