Tras la investigación del diario El País que mostró que la ministra de la Suprema Corte de Justicia, Yasmín Esquivel, plagió 209 de las 456 páginas de su tesis doctoral, la Universidad Complutense de Madrid se “desmarcó” del titulo de doctorado otorgado de manera conjunta con la Universidad Anáhuac.
En la biografía compartida por la misma Esquivel al Senado para ser elegida ministra de la Corte, aseguró que obtuvo su doctorado en la Universidad Anáhuac “en convenio” con la universidad española.
Sin embargo, la Complutense declaró al diario El País que nunca sustentó su tesis doctoral en la casa de estudios española, por lo que no puede ser considerada como una de sus doctoras.
“Gracias a Dios no tenemos nada que ver con esa tesis doctoral (…) La ministra Esquivel hizo su tesis bajo su responsabilidad y bajo supervisión mexicana y ahí ni la facultad de Derecho ni la Universidad Complutense pintan nada” afirmó el decano de Derecho de la universidad española, Ricardo Alonso ante el Consejo de Gobierno con la intención de “tranquilizar a la comunidad universitaria”.
El portavoz de la universidad madrileña explicó al medio español que “a todos los efectos eres doctor por la Complutense cuando has hecho la tesis en la universidad y se ha defendido en un tribunal de la Complutense. En el caso de la ministra Esquivel, la Complutense no tiene nada que ver”.
La ministra Esquivel comprobó al medio El País haber aprobado las clases impartidas por los profesores de la Complutense y que le dieron uno de los requisitos para iniciar su tesis. Además, la ahora ministra tuvo la opción de elegir en cuál de las dos universidades haría su tesis. A pesar de que en 2001 Esquivel inscribió su proyecto ante la Complutense y se le asigno un director, la universidad aseguró que los trámites no pasaron de ahí.
De acuerdo con una investigación publicada por los periodistas Zedryk Raziel y Beatriz Guillén, 209 de las 456 páginas de la tesis titulada “Los derechos fundamentales en el sistema jurídico mexicano y su defensa”, corresponden con trabajos publicados antes por otros 12 autores, dos de los cuales confirmaron el plagio a El País.
Entre las personas a las que Esquivel habría plagiado se encuentran: Jorge Carpizo MacGregor, exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); un expresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH); un exministro español de Cultura; un expresidente del Tribunal Supremo de España y abogados mexicanos, italianos, españoles y alemanes.
Esquivel entregó su tesis doctoral en 2008, cuando fungía como magistrada en el Tribunal Superior Agrario. Posteriormente, en diciembre de aquel año y enero del siguiente, obtuvo el voto aprobatorio de siete sinodales de la Universidad Anáhuac. Finalmente, en junio de 2009 recibió su título de posgrado y para diciembre la Secretaría de Educación Pública (SEP) le expidió su cédula profesional de doctora.
Según lo revelado por El País, el plagio constituye el 46.5% de la tesis doctoral, sin contar el título, índice, agradecimientos y la bibliografía.