En una reflexión sobre la manera en que fue tratada la ausencia del presidente Andrés Manuel López Obrador por su padecimiento de Covid-19 y las especulaciones sobre el agravamiento de su salud, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, calificó el tratamiento como mezquino.
“No se vale desde luego que una campaña de odio se desate de tal manera y dejaría ahí como reflexión un poco lo que decía Mao Zedong, que decía que ‘hay de aquellos que hablan con miel en los labios y ponzoña en el corazón', comentó el funcionario federal para dar fin a los cuestionamientos entorno a la salud del mandatario federal.
Cuestionado sobre si este viernes el jefe del Ejecutivo federal se reincorporará a sus actividades, el titular de Gobernación dijo que dependerá de que su prueba Covid-19 salga negativa. Al mismo tiempo, consideró que el Diario de Yucatán tuvo un exceso al informar que el tabasqueño había sufrido un infarto.
Ayer, en un mensaje de 18:08 minutos, el presidente Andrés Manuel López Obrador puso un alto a las especulaciones que desde hace cuatro días aparecieron en la opinión pública sobre un agravamiento de su salud derivada de un contagio de Covid-19.
López Obrador comenzó explicando que el fin de semana realizó una intensa gira de trabajo por el sureste mexicano, que comprendió Veracruz, Quintana Roo y Mérida y que complicaron un incipiente cuadro de coronavirus.
El domingo, el jefe del Ejecutivo federal narró que tuvo una fuerte descompensación por una baja de presión que lo llevó a padecer un vaguido, sin perder el conocimiento, y que fue tratado rápidamente por los médicos militares con quienes se encontraba.
“Que nos quede de enseñanza a los mexicanos, que es mezquina la manera en que seudoperiodistas responden a intereses obscuros”, apuntó el López Hernández.
En su mensaje del miércoles, el mandatario federal cargó contra sus opositores, quienes durante estos cuatro días han especulado sobre sus padecimientos e incluso, dijo, lo han matado para generar un ambiente de ingobernabilidad.
“Hay algunas personas que quisieran que yo desapareciera pero no deben de actuar de esa manera. Ya hasta me producen sentimientos de afecto porque los considero muy desprovistos de buenos sentimientos, los veo muy solos, muy vacíos, con mucho odio, no deberían de pensar así, no hay que desearle el mal a nadie”, sostuvo López Obrador ayer en su mensaje.