Ricardo Mejía, candidato del Partido del Trabajo (PT) a la gubernatura de Coahuila, reconoció que los resultados electorales preliminares no lo favorecen; sin embargo, acusó presiones e intromisiones de “dos aparatos de poder” durante las campañas electorales.
Mediante una conferencia de prensa, el exsubsecretario de Seguridad Pública agradeció a los ciudadanos que votaron por su proyecto y dijo que su candidatura nunca fue apoyada por algún gobierno, grupo económico o delincuencial
“Desafortunadamente la participación ciudadana no alcanzó los niveles que eran deseables para poder generar una alternancia política. Esperábamos una votación de entre 63 y 65 por ciento y según el PREP es del 54 por ciento; desafortunadamente no hubo esa participación electoral”, reclamó el candidato petista.
“Adicionalmente hay que señalar que vivimos una elección que no se dio en condiciones equitativas, sobre todo con un despliegue del gobierno del estado, donde hubo sin duda una omisión permanente y sistemática del órgano electoral, quien nunca paró el reparto de despensas, ni de entrega de beneficios de parte del gobierno del estado [...] Todo para mantener los privilegios del moreirato”, añadió.
Asimismo, dijo que su proyecto político se mantendrá vivo y celebró que su candidatura haya recibido más de 200 mil votos “libres, ciudadanos, que no estuvieron sujetos a despensas, presiones, acarreos, etc”.
Finalmente, recordó que presentó más de 20 quejas electorales contra Manolo Jiménez, candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), las cuales, según Mejía, fueron ignoradas por el Instituto Electoral de Coahuila.