Este lunes, en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco de la Ciudad de México, las candidatas y el candidato a la Presidencia de la República, Xóchitl Gálvez, Claudia Sheinbaum y Jorge Álvarez Máynez, han estampado sus firmas en el Compromiso Nacional por la Paz.
Este pacto, respaldado por autoridades religiosas, víctimas de la violencia y expertos, busca abordar la persistente inseguridad en México.
Aunque llegaron en diferentes momentos, los tres aspirantes se unieron en su compromiso con la paz y la seguridad en el país.
La candidata de Morena, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con el diagnóstico actual de violencia, firmando el documento con reservas y presentando su propia adenda. Sheinbaum destacó la necesidad de reconocer las causas profundas de la inseguridad, incluida la marginación y la búsqueda de justicia social.
El compromiso subraya la insuficiencia de las estrategias de seguridad de los gobiernos federal, estatales y locales, que han dado lugar a nuevas formas de violencia. Sheinbaum argumentó que desde el inicio de la llamada guerra contra el narcotráfico, los homicidios dolosos se han multiplicado cuatro veces, pero desde 2018, gracias a un cambio de enfoque hacia la paz y la seguridad, han comenzado a disminuir.
Jorge Álvarez Máynez, candidato de Movimiento Ciudadano, fue el primero en firmar y señaló a los partidos rivales como responsables de la crisis de violencia en México. Criticó las propuestas de Gálvez y Sheinbaum, argumentando que aún están impregnadas de políticas punitivas.
Por su parte, Xóchitl Gálvez, de la coalición Fuerza y Corazón por México, respaldó plenamente el compromiso, destacando la necesidad de abordar la violencia. Gálvez comenzó su participación recordando a los sacerdotes católicos asesinados durante el actual sexenio y relató que conoció a los jesuitas de la Sierra Tarahumara, cuyos asesinatos desencadenaron en estos Diálogos por la Paz.
Principales Puntos del Compromiso por la Paz
El Compromiso por la Paz, presentado por los organizadores, destaca siete ejes fundamentales que buscan ser prioritarios en la agenda política. Ana Paula Hernández Romano, en representación de los organizadores, instó a las candidatas y al candidato a la Presidencia a debatir y priorizar estas áreas.
Uno de los ejes propuestos es la implementación de políticas de cuidado con un enfoque de derechos humanos, dirigidas a fortalecer el valor de la vida en la adolescencia y juventud.
Asimismo, se plantea el fortalecimiento de las fuerzas policiales municipales, conectándolas con el sistema de justicia para garantizar la seguridad del territorio y permitir la retirada gradual de las fuerzas militares de las labores de seguridad pública.
Otro punto crucial es la renovación del sistema de justicia, tanto a nivel federal como estatal, para asegurar su capacidad de investigación y autonomía en la resolución de casos.
La propuesta también incluye una reforma integral del sistema penitenciario, con el objetivo de combatir la corrupción y la extorsión, garantizando el respeto de los derechos de los reclusos.
Para abordar los riesgos de adicciones y la cooptación por parte de grupos criminales, se plantea una estrategia con presupuesto asignado que fortalezca la seguridad y el bienestar de los jóvenes.
Además, se propone proteger a los gobiernos municipales de las influencias de las economías criminales, mediante programas que promuevan la seguridad, la justicia y la paz, con participación activa de la sociedad.
Por último, se hace un llamado a atender la crisis de derechos humanos, focalizándose en la protección de personas desaparecidas, la violencia contra mujeres y migrantes, así como en promover la autonomía de los pueblos indígenas.
Estas propuestas, derivadas de mesas de diálogo con expertos y víctimas de la violencia, constituyen un total de 117 medidas específicas que buscan contribuir a la construcción de un México más seguro y justo.