Esta mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador respondió a la solicitud de varios actores de la oposición, incluida la ex candidata Xóchitl Gálvez, para que se realice un recuento de votos de la reciente jornada electoral, utilizando la consigna que empleó en 2006 para denunciar fraude electoral: "¡Voto por voto, casilla por casilla!".
“Sí me preguntan acerca de que se cuenten los votos, pues yo respondería: ¡Voto por voto, casilla por casilla! Porque el que nada debe nada teme, y la regla de oro de la democracia es la transparencia. Eso no lo aceptaron cuando el fraude de 2006”, enfatizó durante la conferencia matutina de este miércoles.
López Obrador se mostró a favor del recuento de votos, aunque puntualizó que la situación actual es muy distinta a la de 2006. En esa ocasión, Felipe Calderón obtuvo solo un 0.56% más de votos que él, mientras que en las elecciones del domingo pasado, Claudia Sheinbaum Pardo ganó por más de 30 puntos de diferencia.
El mandatario federal expuso que la derrota para los conservadores “fue una sacudida… mejor digo para los del norte, para el habla norteña, una zarandeada; y para el habla de mi tierra (sureste) fue una zamarreada que hacía falta”.
Ante esto, sugirió a sus adversarios guardar silencio por un tiempo para enfriar los ánimos.
Ejemplificó que Denise Dresser, politóloga, comentó en un noticiario nocturno que los mexicanos "volvieron a ponerse las cadenas que les quitamos", a lo que López Obrador ironizó invocando a Josefa Ortiz de Domínguez.
Y continuó: “Pero a ese nivel: ‘El pueblo es masoquista, el pueblo quiere ser esclavo, el pueblo no sabe, el pueblo es tonto’. Mientras sigan pensando así, pues no van a poder conformar una verdadera oposición que hace falta, que se requiere en el país y en todo el mundo, para tener una auténtica democracia o libertades”.
López Obrador hizo un llamado a los mexicanos a actuar con responsabilidad y de manera pacífica, respetando a todos y recordando el amor al prójimo. Se declaró a favor de contar los votos necesarios y subrayó que la violencia no es compatible con la democracia ni con la izquierda.
Destacó tres características de los conservadores: hipocresía, autoritarismo y corrupción. Citando a León Tolstoi, afirmó que "un Estado que no procura la justicia no es más que una banda de malhechores". Por ello, no le sorprende la solicitud de recuento de votos.
Finalmente, insistió en que una democracia necesita oposición para garantizar la pluralidad y competencia, ya que el dominio de una sola organización y el pensamiento único se asemejan más a una dictadura o totalitarismo.