El presidente Andrés Manuel López Obrador comunicó que su administración se está preparando para la próxima temporada de lluvias y huracanes, pese a que aún persiste una fase de sequía.
Durante la rueda de prensa matutina del lunes en Palacio Nacional, el mandatario enfatizó la necesidad de estar preparados frente a posibles precipitaciones intensas e inundaciones que podrían impactar diversas zonas del país.
López Obrador destacó que su gobierno posee amplia experiencia en ejecutar planes de auxilio para los afectados, resaltando las estrategias DN-III y de la Marina, junto con la coordinación de protección civil a nivel municipal y estatal.
Manifestó que estas acciones están orientadas a brindar asistencia rápida y efectiva en situaciones de emergencia por desastres naturales.
El presidente comentó que los trabajos de recuperación en Acapulco, golpeado por el huracán Otis hace ocho meses, continúan progresando. Aunque este asunto se politizó durante las elecciones, el gobierno no ha cesado de restaurar el puerto y atender a los damnificados.
En este contexto, López Obrador enfatizó que el gobierno no puede bajar la guardia y debe estar preparado para enfrentar las lluvias e inundaciones que podrían surgir en las próximas semanas.
El presidente hizo hincapié en los contrastes climáticos que enfrenta el país, pasando de periodos de sequía severa a temporadas de lluvias intensas.
“Son los contrastes, las dos caras de la moneda, la sequía que afecta mucho y luego las lluvias cuando son torrenciales, cuando inundan en varias partes de nuestro país, hay que estar pendientes”, expresó.
López Obrador informó que en naciones como Estados Unidos ya se están experimentando inundaciones debido a las lluvias, por lo que es crucial que México también se mantenga vigilante.
El presidente recordó que este fin de semana se registraron lluvias históricas en el sur de Quintana Roo, que resultaron en inundaciones en la capital estatal y cortes de energía eléctrica en localidades como Othón P. Blanco.
De esta manera, insistió en la necesidad de una preparación constante y eficaz para afrontar los retos climáticos.
Finalmente, el presidente reafirmó que su gobierno seguirá colaborando estrechamente con las fuerzas armadas y las autoridades locales para asegurar la seguridad y bienestar de la población ante la inminente temporada de lluvias y huracanes.