El Senado de la República ha decidido limitar el acceso de ciudadanos ajenos al recinto legislativo para asegurar la seguridad durante las sesiones, según un aviso firmado por el presidente de la Cámara Alta, Gerardo Fernández Noroña.
Esta restricción se basa en el artículo 61 de la Constitución y el artículo 310 del Reglamento del Senado, que establecen que el presidente de la Mesa Directiva debe “velar por la inviolabilidad del recinto” utilizando todos los recursos jurídicos a su disposición.
En el comunicado se indica que “se suspende el acceso a ciudadanos que no laboren en esta Cámara de Senadores o que no actúen como enlaces legislativos”. El propósito de esta medida es garantizar “el desarrollo libre y seguro de las sesiones ordinarias” en la Cámara de Senadores.
Cabe recordar que el pasado 10 de septiembre, durante la discusión de la reforma al Poder Judicial, manifestantes en contra del dictamen interrumpieron la sesión al ingresar al pleno del Senado.
Esto obligó a los legisladores a continuar la discusión en la Antigua Casona de Xicoténcatl, donde la reforma fue aprobada con el voto a favor del panista Miguel Ángel Yunes Márquez, a pesar de la ausencia de Daniel Barreda del Movimiento Ciudadano.
Además, cuando la reforma fue discutida en la Cámara de Diputados, trabajadores del Poder Judicial se manifestaron en los alrededores del San Lázaro, impidiendo el acceso al recinto legislativo, lo que llevó a los legisladores a sesionar en la Sala de Armas de la Magdalena Mixiuhca.