La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró este martes que las inversiones privadas, tanto nacionales como extranjeras, estarán "seguras" y que su gobierno mantendrá una política fiscal "responsable", en su primer discurso como mandataria.
“Lo digo con toda claridad: tengan la certeza que las inversiones de accionistas de nacionales y extranjeros estarán seguras en nuestro país”, afirmó Sheinbaum tras recibir la banda presidencial en la Cámara de Diputados.
Sheinbaum, la primera mujer en asumir la presidencia para el periodo 2024-2030, recibió la banda presidencial de Andrés Manuel López Obrador, presidente saliente del mismo partido, Morena.
En su discurso, la nueva presidenta destacó sus prioridades macroeconómicas en un contexto de incertidumbre por las reformas al Poder Judicial y la mayoría del oficialismo en el Congreso, que podría reformar la Constitución sin necesidad de acuerdos con la oposición.
“En materia económica, se mantendrá la autonomía del Banco de México, una política fiscal responsable, una proporción responsable entre deuda y producto interior bruto, promoveremos la inversión pública y la inversión privada”, señaló Sheinbaum.
Además, destacó la importancia del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) para continuar con el impulso del nearshoring o relocalización de empresas.
“Estados Unidos, Canadá y México sabemos que la cooperación económica fortalece a las tres naciones, es claro que entre nosotros no competimos, nos complementamos, y además generamos las condiciones para una mayor consolidación de la economía de todo el continente”, expresó.
Por último, se comprometió a implementar medidas para combatir la inflación, que en septiembre alcanzó el 4.66%.
“No aumentaremos el precio de las gasolinas, del diésel, del gas doméstico, ni de la electricidad en términos reales. En las próximas semanas estaremos convocando a empresarios para confirmar el acuerdo que mantiene sin aumentos el precio de la canasta básica“, declaró.
Asimismo, prometió que abrirá la generación de energías renovables a la inversión privada, aunque la empresa del Estado, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) mantendrá el control del 54% de la generación.