La Cámara de Senadores aprobó este miércoles en lo general las reformas a los artículos 4 y 5 de la Constitución para prohibir los vapeadores, cigarrillos electrónicos y el uso del fentanilo.
Con 110 votos a favor, cinco en contra y dos abstenciones, los senadores aprobaron el dictamen que determina la penalización de “la producción, distribución y enajenación de sustancias tóxicas, precursores químicos y drogas sintéticas no autorizadas legalmente, como el uso ilícito del fentanilo”.
Los legisladores de Morena, PT y del Verde aseguraron que con la prohibición de los vapeadores se evitará que los niños y adolescentes tengan enfermedades pulmonares y cardiovasculares provocadas por hacer uso de ese tipo de dispositivos que resultan nocivos a la salud.
El senador por Yucatán, Jorge Carlos Ramírez Marino aseguró que era necesario dejar a un lado el argumento de que la reforma interviene con las libertades de las personas a decidir si consumen o no los vapeadores, ya que las modificaciones buscan mitigar "una emergencia real" provocada por su consumo.
De acuerdo con la reforma, se aprobará “toda actividad relacionada con cigarrillos electrónicos, vapeadores y demás sistemas o dispositivos análogos que señale la ley”.
Entre los beneficios, se destaca que la reforma “contribuirá a erradicar los daños respiratorios, cardiovasculares, mutagénicos y demás afectaciones a la salud derivados de los cigarrillos electrónicos, vapeadores y demás sistemas o dispositivos electrónicos análogos, sustancias tóxicas, precursores químicos y drogas sintéticas no autorizadas legalmente".
Durante el debate en las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, Salud, y Estudios Legislativos el senador panista Ricardo Anaya resaltó que el mercado de vapeadores en México es de 20 mil millones, pero en el momento de prohibirlo se volverá un negocio del doble que ahora será controlado por el mercado negro y el crimen organizado que traerá el producto de China.
Por su parte, la senadora del Verde, Maki Ortiz, afirmó que aunque es más dañino para la salud, fumar tabaco que un vapeador, “no por eso deja de ser un problema de salud pública”, porque lo más grave es que el consumo mayor está en los adolescentes.