Este jueves, un grupo de manifestantes irrumpió en la sesión ordinaria del Congreso del Estado de Sinaloa, exigiendo justicia, seguridad y la destitución del gobernador Rubén Rocha Moya.
Desde temprano, bloquearon el bulevar Pedro Infante, frente al acceso principal del recinto legislativo, lo que generó caos vial en la zona.
Los manifestantes, entre los que se encontraban madres de personas desaparecidas, comerciantes y ciudadanos afectados por la violencia, portaban pancartas con mensajes como “Queremos paz”, “Culiacán no se rinde” y “Justicia muerta en Sinaloa”.
Además, colocaron un ataúd fuera del Congreso como símbolo de la creciente violencia en el estado.
Algunos manifestantes lograron ingresar al Salón de Sesiones, desplegaron mantas sobre el mobiliario y corearon consignas como “¡Fuera Rocha!” mientras mostraban fichas de personas desaparecidas.
Ante la interrupción, se declaró un receso y se apagó el audio de la transmisión en redes sociales, permitiendo a los diputados retomar la sesión una hora después.
Miembros de la Junta de Coordinación Política del Congreso local sostuvieron una reunión con los inconformes, donde se escucharon testimonios de las madres buscadoras.
Durante la reunión, los diputados se excusaron diciendo: “Nosotros no somos el gobierno”, mientras un joven cuestionaba la falta de acción inmediata por parte de las autoridades en los casos de la población en comparación con los funcionarios.
A pesar de la tensión, no se reportaron incidentes mayores, pero la protesta interrumpió el desarrollo normal de la sesión legislativa.