El líder pesquero Sunshine Rodríguez Peña, quien trabajaba en el Puerto de San Felipe, en Mexicali, Baja California, fue asesinado el sábado pasado al recibir más de 40 disparos, según informó este domingo la Fiscalía General del Estado (FGE).
La titular de la Fiscalía, María Elena Andrade, explicó que este homicidio fue "definitivamente un caso atípico porque no es una zona que se considere de índice delincuencial o de violencia".
Además, añadió que presuntamente se trató de un ataque directo por parte de al menos tres hombres encapuchados, quienes llegaron en un vehículo blanco y dispararon armas de fuego calibre nueve milímetros.
Andrade detalló que "no hubo víctimas colaterales y consideramos que no fue así a pesar del horario, porque el ataque fue directo sobre la persona (...) todos los disparos, todos los casquillos penetraron en su cuerpo porque tiene más de 70 lesiones, es decir, algunos son de entrada y otros de salida, todos o casi todos fueron directamente sobre su humanidad".
La fiscal indicó que investigarán si los atacantes "esperaron a que se quedara en un momento solo", ya que había personas acompañándolo en ese momento, pero nadie más resultó herido.
La gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila, expresó a través de un mensaje en redes sociales que no habrá impunidad en el caso y que se llegará "hasta las últimas consecuencias" para esclarecer el homicidio.
"Hemos solicitado a la Fiscalía General del Estado esclarecer este hecho. La Fiscal María Elena Andrade contará con las facilidades que necesite desde la Secretaría de Seguridad Ciudadana del Estado como parte de la investigación", agregó la gobernadora.
La familia de Rodríguez Peña, por su parte, declaró a medios locales que él había recibido amenazas durante varios años, pero que no se escondía de nadie y seguía vendiendo pescado en distintos barrios de Mexicali.
Cabe recordar que en febrero de 2023, Rodríguez Peña fue declarado inocente por un juez tras haber pasado dos años en prisión, acusado de delincuencia organizada con afectación al medio ambiente.
Fue señalado como presunto operador de la pesca ilegal del pez totoaba, lo que ha contribuido a la extinción de la vaquita marina en el noroeste de México.
Tras un juicio de cuatro semanas, donde la Fiscalía General de la República (FGR) presentó más de 20 testigos, el juez Enrique Miranda determinó que el Ministerio Público "no presentó evidencias sólidas, testimonios, ni pruebas contundentes que acreditaran la responsabilidad del inculpado en delito alguno".