A días de que finalice la primera etapa para reclutar a los funcionarios de casilla para la elección judicial, 6.1 millones de ciudadanos han decidido no participar en este proceso.
El Instituto Nacional Electoral (INE) requiere 1.5 millones de personas para formar parte de las más de 84,000 casillas seccionales que se instalarán, una cifra significativamente menor a las 170,000 casillas de la elección presidencial de 2024.
De los 13 millones de ciudadanos seleccionados por sorteo, que fueron elegidos según el mes de su nacimiento (febrero y mayo) y la primera letra de su apellido (A), la mayoría ha optado por no participar.
Este rechazo se debe principalmente a la falta de remuneración económica, ya que solo se les proporciona alimentación, además de la carga de trabajo por un día completo.
Hasta el 13 de marzo, se registraron 6 millones 172,574 rechazos, siendo la principal causa la imposibilidad de los capacitadores para localizar a las personas en sus domicilios, con un total de 2.9 millones de casos.
Otros motivos comunes son compromisos laborales o sociales (1.4 millones), razones de salud (675,000) y, en menor medida, impedimentos legales o normativos, y discapacidad.
La primera fase, que comenzó el 9 de febrero y finalizará el 31 de marzo de 2025, consiste en localizar, notificar y capacitar a los ciudadanos sorteados.
De los 13 millones seleccionados, 12.5 millones (el 95%) ya fueron visitados por los capacitadores, quienes también han entregado notificaciones a 5 millones de personas, de las cuales 1.4 millones ya están recibiendo capacitación para ser funcionarios.
Aunque aún faltan alrededor de 71,000 personas para alcanzar la meta de funcionarios necesarios, el INE espera superar esta cifra debido a posibles bajas en las próximas semanas por diversas razones.
El 7 de abril se llevará a cabo la designación oficial de los funcionarios, basándose en su escolaridad.
Las mesas de casilla estarán conformadas por un presidente, dos secretarios, tres escrutadores y tres suplentes generales.
La segunda etapa de capacitación, que va del 9 de abril al 31 de mayo, incluirá simulacros y prácticas para los funcionarios de casilla, quienes, en esta elección, no contarán los votos ni colocarán los resultados en las sábanas, como se hacía en procesos anteriores. En lugar de eso, deberán clasificar los votos por color y enviarlos a las juntas distritales para el cómputo.
Guadalupe Taddei, presidenta del INE, estima que la participación electoral para la renovación del Poder Judicial será de entre el 8% y el 15%, cifra mucho menor a la registrada en las elecciones presidenciales de 2024, donde la participación alcanzó el 61%.
Por otro lado, el INE ha tenido que reducir el número de supervisores y capacitadores electorales debido a un recorte presupuestal aprobado por la Cámara de Diputados. Para esta elección, se requerirán 24,913 supervisores y capacitadores, quienes ya están casi todos contratados (99%).
En cuanto a las bajas, el INE ha registrado 1,288 renuncias de capacitadores y 57 de supervisores, lo que representa un 6% y un 1.6% respectivamente, cifras inferiores a las de procesos anteriores.