A partir del primero de enero de 2016 el precio de las gasolinas y el diesel podrían empezar a bajar, al moverse con su referencia de precios internacionales, señaló en entrevista con El Financiero, Miguel Messmacher, subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda y Crédito (SHCP).
Explicó que se plantea establecer precios máximos y mínimos a las gasolinas, de acuerdo con el precio promedio de los combustibles en Estados Unidos, que tendría como efecto variaciones estacionales en el precio de las gasolinas en México.
“Por ejemplo, que su precio suba en los meses de verano, cuando hay mayor consumo, y que baje en los meses de invierno, es decir a inicio y final de año”, indicó.
Jorge Sánchez, socio de Impuestos y Legal de Deloitte, dijo que México es uno de los pocos países que tiene un esquema de precios fijos establecidos por el gobierno.
En la actualidad, los precios de las gasolinas en México tienen un costo único para todo el año, el cual no cambia si el precio en el exterior baja. Pero si los precios suben, estos no se incrementan en el país.
Esto ocurre debido a que se cobra un IEPS federal que funciona como subsidio, que representa un gasto fiscal.
Messmacher subrayó que al determinar un Impuesto Especial sobre la Producción y Servicios (IEPS) federal fijo a las gasolinas y diesel para el próximo año, se evitará que se tengan índices negativos en la recaudación de este impuesto, el cual ha sido positivo este año al amortiguar la caída de los ingresos petroleros.
Como desde finales del año pasado las gasolinas han bajado sus precios, se ha registrado una recaudación positiva de este IEPS, explicó Fernando Ramones, investigador del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
“Este año bajaron los precios de referencia, pero no se observó una disminución en el precio de las gasolinas en México. Lo que estamos proponiendo, y es necesario para que funcione el mercado liberalizado (que llegará en 2018), es que en lugar de ver movimientos del IEPS sea un IEPS fijo determinado en pesos y centavos para que el precio final empiece a reflejar los cambios en la referencia, tanto al alza como a la baja”, dijo Messmacher.
Con una tasa fija del IEPS federal por litro, si sube o baja el precio de referencia de las gasolinas en México se seguirá recaudando IEPS, como pasa en otros países, anotó Jorge Sánchez, de Deloitte. | elFinanciero