Cuernavaca, Morelos.- Ciudadanos e integrantes de diferentes agrupaciones dieron a conocer, este lunes, la convocatoria a una marcha contra el aumento a combustibles y demás precios en productos y servicios para el próximo domingo y advirtieron que mantendrán jornadas informativas diarias en el zócalo de Cuernavaca. Campesinos se sumaron al llamado, al denunciar que es uno de los sectores más afectados con esta política económica.

En conferencia de prensa, integrantes de algunas agrupaciones y personas que acudieron en calidad de ciudadanos y a título personal llamaron a la población a movilizarse de forma pacífica y legal contra el gasolinazo y otras políticas económicas que dejarán a la mayoría de la gente en condiciones de pobreza.

En la Plaza de Armas “Emiliano Zapata”, dieron a conocer que el objetivo es llamar a la “defensa de la soberanía nacional” y exigir el cambio de gobernantes que no han dado resultados en su encomienda.

Adelantaron que seguirán con acciones pacíficas tales como el “tendedero informativo”, que implica brindar información a la gente sobre lo que está ocurriendo y lo que viene en el corto plazo.

Expusieron que ya hay efectos claros del gasolinazo como el aumento en el precio del kilogramo de tortilla hasta en 18 y 20 pesos; el incremento a la tarifa del transporte colectivo, así como el alza a los precios en alimentos, mientras que el salario no aumenta en la misma proporción.

Comentaron que respecto del aumento en el pasaje no hubo consulta a los usuarios y –aseguraron– ya hay inconformidad hasta entre los choferes de las “rutas”, ya que los concesionarios “les subieron la cuenta a 500 pesos diarios”, lo que deriva en problemas que van desde el maltrato al usuario, la competencia por el pasaje al conducir, entre otros.

Denunciaron que de por sí el aumento de 1.50 pesos fue injusto, a ello se suma que muchos transportistas están abusando con cobros superiores.

Los ciudadanos destacaron que el llamado está dirigido de manera especial a las mujeres, ya que son quienes suelen sufrir de forma directa el incremento en la canasta básica.

Los manifestantes, entre ellos Susana Díaz Pineda, del Centro Digna Ochoa, señalaron que la gente debe perder el miedo y salir a protestar en paz para reclamar con el fin de que se cancelen los aumentos a los combustibles y a la energía eléctrica, así como a la canasta básica que implica una violación a los derechos humanos.

Por su lado, Raúl Perea Ángeles, presidente de la Fundación para el Desarrollo Nacional Rural de México (Fundenar), con presencia en 18 entidades del país), aseveró que la afectación al campo es insostenible porque es el sector que consume mayor cantidad de diésel y los picos en los meses que siguen (porque seguirán los ajustes) podrían dejar a miles de productores sin capacidad de cultivar la tierra.

Dijo que hay supuestos estímulos fiscales que no se cumplen, ya que supuestamente para los campesinos hay un subsidio para los productores agrícolas en el diésel y en la gasolina al sector pesquero y no se está respetando.

Recordó que Petróleos Mexicanos (Pemex) tiene una gasolinera en Houston, Estados Unidos, donde el precio es menor al que se da en México.

Perea Ángeles consideró que los campesinos tendrán un impacto severo porque ya desde hace unos años el campo ya no es rentable para muchos; por lo tanto, habrá menos productores y capacidad de autosuficiencia en la producción de alimentos en el país.

Denunció que el gobierno está ocultando información sobre los ajustes en las distintas zonas y qué porcentaje de cada litro se queda “en los bolsillos de gobierno o de algunos corruptos”.

El dirigente refirió que el precio de la tortilla subió en promedio en un 25%, aunque los incrementos en productos del campo podrían subir desde el 5 hasta el 25% al llegar al consumidor, porque además del impacto natural del alza en combustibles hay proveedores que abusan. Sin embargo, denunció, la Procuraduría Federal del Consumidor ni otras dependencias han hecho nada.