Trabajadores de múltiples sindicatos, tanto de la Confederación de Trabajadores de México, como del Nuevo Grupo sindical, marcharon incluso con vehículos de transporte de carga. Por otra parte salieron a la calle integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) y de sindicatos tales como telefonistas, el Sindicato Mexicano de Electricistas, de instituciones académicas como la UNAM, o el Cobaem, entre otros, así como asociaciones que integran el “Pacto Morelos por la Soberanía Alimentaria y Energética, los Derechos de los Trabajadores y las Garantías Constitucionales”.
Además, marcharon simpatizantes y militantes del PRD encabezados por diputados locales, quienes reclamaron seguridad y justicia social.
Prácticamente todo confluyeron en el Zócalo. Algunos hicieron su mitin en la calle de Galeana a espaldas del Palacio de Gobierno (por donde suelen pasar los desfiles tradicionales) y otros más en la ahora llamada Plaza Emiliano Zapata conocida o Plaza de Armas.
Los cetemistas, como lo anunciaron, presentaron propuestas dirigidas a mejorar la seguridad y certeza para consolidar la gobernabilidad del estado y exigieron el esclarecimiento del asesinato del líder de la agrupación, Tito Barerra Ocampo.
Por su parte, las agrupaciones independientes también reclamaron seguridad, paz y fin a la guerra violenta. En el zócalo expusieron el manifiesto firmado por varias organizaciones, que establece su postura “contra la violencia del sistema que lleva a cabo una criminal guerra donde es el pueblo el que pone los muertos y la mafia ligada al poder se lleva las ganancias del narcotráfico, en defensa de los derechos laborales para que no se siga pisoteando las conquistas históricas producto de años de luchas, como la que dio inicio en 1886 a la realización del Primero de Mayo como una demostración de unidad y luchas del proletariado mundial”.
Insistieron en sus demandas en contra de la reforma a la Ley Federal del Trabajo que acusaron, impulsan partidos políticos y grupos de poder
Reclamaron respeto a la autonomía sindical, al derecho al empleo de 16 mil trabajadores electricistas del SME y su derecho a ser contratados por una empresa pública que preste el servicio de energía eléctrica en el centro del país”.
Así mismo reiteraron la demanda de empleo para jóvenes, con salarios dignos, así como educación y capacitación
“En cuanto al salario mínimo actual, señalamos que es una cuarta parte del salario mínimo de 1976, por lo que si éste no hubiera presentado pérdida de poder adquisitivo, el salario mínimo actual mensual debiera ser de $6,984 pesos y no de $1,746 como actualmente es. La participación de los salarios en el PIB, pasó del 44% en 1976, a menos del 30%, a fines de la primera década del tercer milenio, lo cual es un indicador de la regresión en las condiciones de vida de las mayorías trabajadoras en México, convirtiendo el Salario Mínimo en un problema de Equidad Social y de Proyecto Nacional” establece dicho manifiesto.
Trabajadores del magisterio fijan su postura
La dirigencia magisterial convocó a una sesión con líderes sindicales de la Federación Democrática de Sindicatos de Servidores Públicos (Fedessp), donde fijaron su postura en esta fecha, pues cabe recordar que hasta este lunes regresan de vacaciones la mayoría de los trabajadores de la educación y por eso no marcharon.
El secretario general de la Sección XIX del SNTE, Luis Manuel Rodríguez Olvera, aseveró que el proyecto que tienen los legisladores del Congreso de la Unión sobre la reforma laboral “no ha sido suficientemente discutido y rechazo cualquier modificación a la ley sin la garantía del respeto a los derechos y conquistas laborales de los trabajadores y a sus organizaciones sindicales”.
Insistió en que esta modificación “sólo se dará si garantiza condiciones de estabilidad laboral, mayores empleos y bien remunerados, y la posibilidad de que la clase trabajadora aspire a mejores estándares en su calidad de vida. Es lamentable que la falta de suficientes fuentes de trabajo se convierta en una frustración para la población, en especial para los jóvenes a cuya falta de oportunidades de desarrollo, se ensombrece su futuro en las filas de la delincuencia organizada”.
Por su parte, el delegado del Comité Nacional del SNTE en la entidad, Moisés Armenta Vega, “dijo que entre todos los trabajadores federados, son los maestros quienes están llamados a visualizar y generar un mejor futuro a través de la educación de la población, pero sin el apoyo decidido y suficiente de los gobiernos, no podrán superarse las condiciones adversas en que muchos educandos reciben su instrucción”. Llamó a los maestros a mantener la unidad.