“No estamos como estábamos hace cuatro o cinco años, estamos en la lona con una fuerte crisis, pero hay una buena noticia, que es el hecho de que la alerta de viaje que emitió el departamento de Estado de Estados Unidos, ya no menciona a Cuernavaca como zona de riesgo, lo cual va a permitir que muchas escuelas nos vuelvan a enviar a estudiantes para que vengan a estudiar español”.
En declaraciones emitidas la semana anterior, resaltó que las universidades del vecino país están muy comunicadas a través de la redes y han sabido todo lo que sucede en el estado en materia de inseguridad y es por ello que se han alertado. Eso, dijo, “nos hace estar en una situación crítica, pero la Universidad de California, a raíz de lo que comento, ya levantó el veto para que los estudiantes puedan venir a Cuernavaca, y aunque no van a venir mañana, porque los departamentos académicos de las universidades tienen que aceptar los programas y el presupuesto, creo que para el verano y para el año que entra, las escuelas van a tener mayor afluencia estudiantil”.
Guerrero Garro enfatizó sobre el hecho de que pese a esta situación de inseguridad, “en cinco años no ha habido ningún incidente de estudiantes que hayan venido a estudiar español a Cuernavaca y que los hayan violado o robado; por lo que les hemos dicho que sus estudiantes han estado seguros, aunque ha habido dos o tres incidentes de robo de cartera, pero eso pasa en todo el mundo. En Madrid, en España, en Detroit o en Nueva Orleans te matan, pero en realidad a ellos no les ha pasado nada”, reiteró.
A la fecha, este producto turístico que era importante para el estado y principalmente para la ciudad capital, cuenta en este momento con una baja de hasta 95 por ciento de su capacidad y afluencia que mantenían regularmente, por lo que Francisco Guerrero estimó que al momento “habrá 50 estudiantes en Cuernavaca, cuando debería de haber entre 800 y mil. Yo tengo seis estudiantes, cuando debería tener 200”, finalizó.