Lo anterior, lo confirmó el diputado presidente de la Comisión de Modernización, Jordi Messeguer Gally, quien dijo que es una posibilidad que se explora desde el año pasado, cuando el gobierno estatal determinó cancelar el contrato de compra-venta para la adquisición de dicho predio.

El legislador perredista explicó que legalmente el gobierno del estado cuenta con las condiciones para adquirir este predio (ubicado en el Barrio de Gualupita) sin pagar un monto como el que se había establecido desde el 2013, superior a los 9 millones de pesos.

Sin embargo, insistió en que aún es analizado por la Consejería Jurídica y la Secretaría de Hacienda del   estado.

"Está el proceso de que jurídicamente el gobierno del estado puede expropiarlo con todo el marco jurídico y ya no se cometa ningún tipo de abuso que se pretendía cometer en el mismo terreno y que siga caminando", explicó.

Sin embargo, Messeguer Gally dijo que debido al tiempo que llevaría este proceso jurídico, la obra de la nueva sede del Congreso local no inicie en la presente Legislatura.

"El proyecto sigue caminando pero finalmente entendemos que los tiempos del gobernador, del gobierno, no son los del Legislativo, si nosotros logramos sembrar al menos y dejar etiquetado, como ya lo hicimos, el dinero, y sembrar esta posibilidad creo que como legislatura hemos avanzado mucho, es claro que no vamos a inaugurarlo nosotros, difícilmente en seis meses va poder estar listo", agregó.

En cuanto al presupuesto etiquetado por 500 millones de pesos para este proyecto de construcción, aseguró que permanece intacto y listo para ejercerse en caso de que la obra pueda iniciar antes del mes de septiembre, cuando concluye la LII Legislatura, o bien posterior a ésta.

"Los recursos los ha garantizado el gobernador una y otra vez que están ahí, que están firmes, listos para  ser utilizados en el proyecto, creo que en eso hay confianza de parte de los diputados", comentó.