Tras cuatro semanas de "jaloneos" y negociaciones entre las fuerzas políticas, finalmente ayer, los diputados locales decidieron sobre el futuro de la integración de las salas del Tribunal Superior de Justicia, ya que cinco magistrados concluyen periodo el 17 de julio próximo.
Mediante un acuerdo de la Junta Política y de Gobierno (integrada por coordinadores parlamentarios), se determinó que sólo se someterían a votación del pleno cuatro dictámenes de cinco magistrados que se encontraban en evaluación. Y es que, en el caso de Norberto Calderón Ocampo, determinaron que por ser magistrado supernumerario no tiene derecho a la ratificación.
En tanto que, sí fueron discutidos y votados los cuatro dictámenes que preparó la Junta Política y de Gobierno de una evaluación que se hizo al desempeño de los magistrados Carlos Iván Arenas, María Idalia Franco, Rubén Jasso Díaz y Ángel Garduño González.
Este órgano político determinó dictaminar en contra de la permanencia de Carlos Iván Arenas, Ángel Garduño y María Idalia Franco.
En el primer caso, porque dicho magistrado está involucrado en un juicio por un caso que, presumiblemente, resolvió fuera de ley.
El Congreso del estado decidió que Ángel Garduño no podía ser ratificado por su edad, ya que en dos años cumplirá 65 años, edad máxima que marca la Construcción para ser magistrado.
A la magistrada María Idalia Franco se le acusó de falta de "honorabilidad", pues engañó al Congreso al asegurar que tenía el grado de doctora, con el que incluso firmó documentos, cuando este título lo obtuvo recientemente.
Además, los diputados consideraron que el desempeño de estos tres magistrados no cumplió con los indicadores de evaluación que marca la ley.
La votación
Con más de cuatro horas de retraso inició la sesión ordinaria de ayer, que de inmediato se dedicó al tema de la ratificación de los cuatro magistrados del TSJ, previo a negociaciones a puertas cerradas entre los diputados locales.
En juego estaba la ratificación de María Idalia Franco, que fue respaldada por los diputados Carlos de la Rosa Segura, Jordi Messeguer Gally y Teresa Domínguez Rivera.
En tribuna, los dos primeros legisladores acusaron a la Junta Política y de Gobierno de haber hecho una evaluación "tramposa" del desempeño de los magistrados, de negociaciones "en lo oscurito" y de actos fuera de ley que podrían echar abajo el proceso que se llevó para rechazar la ratificación de los magistrados, principalmente el de María Idalia Franco.
Ambos legisladores se quejaron porque en ningún momento tuvieron en su poder los dictámenes que, a decir suyo, fueron hechos de última hora para su votación, ya por la tarde, en el pleno del Congreso local.
Carlos de la Rosa y Jordi Messeguer respaldaron a la magistrada María Idalia Franco, pues el argumento de peso que usó la Junta Política y de Gobierno para rechazar su ratificación fue la ausencia de un título de grado de doctora que supuestamente no tenía, a la hora de ser evaluada.
Además, el diputado Messeguer Gally calificó como una evaluación "tramposa" la hecha por los coordinadores parlamentarios, al tomar un informe de la Judicatura federal en la que se evalúa por sala el desempeño del TSJ y no por magistrado.
"Son números muy tramposos, muy, muy tramposos, hechos en la madrugada, hechos en lo oscurito, no compartidos a todos y a todas, sino manejados a discreción", manifestó el legislador.
Finalmente, la ratificación de la magistrada en mención fue rechazada con 17 votos en contra.
Para el caso de los magistrados Ángel Garduño González, 25 diputados votaron en contra de su permanencia en el cargo.
En tanto que, 25 diputados también votaron en contra de la ratificación de Carlos Iván Arenas.
Será a finales del mes de junio cuando posiblemente tome protesta el magistrado ratificado, Rubén Jasso Díaz, por ocho años más, de quien por cierto no se expusieron argumentos de peso para respaldar su permanencia en el cargo.