Cuernavaca, Morelos.- El conflicto entre las Rutas 8 y 18 sigue sin resolverse, derivado de la falta de acuerdos con la autoridad estatal para definir los derroteros (trayectos) de ambas organizaciones de transporte. Lo anterior hace latente un nuevo enfrentamiento entre los transportistas de las agrupaciones.
Y es que mientras Mario Román, presidente de la Ruta 8, dijo que insistirán en que se aplique la autorización que la extinta Dirección de Transportes autorizó para ampliar su derrotero en Jiutepec, los representantes de la Ruta 18 afirmaron que no permitirán que las unidades de la agrupación contraria operen por un derrotero que por años han tenido.
De hecho, choferes de la Ruta 18 hacen guardia en las calles aledañas de Jiutepec para evitar que alguna unidad de la Ruta 8 preste servicio hasta el zócalo de ese municipio.
Por su parte, Aurelio Carmona Sandoval, presidente de la agrupación Rutas Unidas, que se sumó a la Federación Auténtica del Transporte en este conflicto, confirmó que el riesgo de un nuevo enfrentamiento es latente, ya que las autoridades de la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMyT) no han querido intervenir y mientras tanto, sólo llaman a conciliar a las partes, sin que instale una mesa de diálogo entre los concesionarios.
Por lo anterior reiteró que se responsabilizará al gobierno del estado de lo que pudiera suceder en Jiutepec por este asunto.
El titular de la SMyT, Manuel Santiago Quijano, dijo que una vez se resuelvan los juicios promovidos por ambas partes, se promoverá la ampliación de derroteros para las dos líneas del transporte público y terminar el conflicto en Jiutepec.
Cabe recordar que el origen de este asunto se dio porque, en el año 2008, la Ruta 8 obtuvo la autorización para ampliar su derrotero en Jiutepec de la colonia Los Pinos hasta el zócalo y en este 2015 se reactivó el permiso, lo que ocasionó la molestia de la agrupación contraria.