Vecinos de la zona aledaña a la obra de ampliación del libramiento de la autopista señalaron que el compromiso de colocar vigilancia policiaca en el trayecto, para sancionar a los vehículos que rebasen el límite de velocidad permitido (sesenta kilómetros por hora) no se respeta, lo que permite sobre todo a los grandes camiones de carga circular de forma peligrosa.
Además, señalaron que en el tramo que va de norte a sur hay al menos una coladera sin su tapa metálica, y los trabajadores no alinean las barreras plásticas que invaden el carril de circulación y obligan a los conductores a realizar maniobras peligrosas.
Indicaron que el delegado de la SCT se ha comprometido varias veces a resolver los problemas causados por la obra pero incumple reiteradamente, lo que les ha obligado a realizar todo tipo de protestas.