Para contabilizar los baches que hay incluso en las calles principales de la capital morelense, se necesitarían varios días porque en las últimas semanas se han duplicado a causa de las lluvias. Y para los prestadores del servicio del transporte estos desperfectos les han costado accidentes y pérdidas económicas.
Pinchaduras de llantas, daños al motor, así como otros problemas son los que han enfrentado los operadores, en su mayoría de taxis, al pasar por una oquedad en la calle sin haberse percatado antes de su existencia.
El mayor problema se presenta cuando se inundan las calles, y los choferes no se percatan de que hay un bache, y pasan a una velocidad mayor. Es en estos casos cuando se han registrado pinchaduras de llantas.
“Baches hay en todos lados; pocas son las calles en las que no encontremos uno. Algunos ya son agujeros en los que nos podríamos quedar atorados. Y el problema es que no se arreglan tan fácilmente porque la lluvia vuelve a quitar el asfalto o el material que utilicen para taparlo”, comentó un taxista.
Ante este problema vial, concesionarios del transporte público solicitarán al alcalde de Cuernavaca, Manuel Martínez Garrigós, que se reinstale la Comisión Municipal del Transporte dado que se acordó reunirse cada mes, y han pasado casi dos meses sin que se sienten a tratar los principales problemas del sector.
Pretenden en esta comisión tratar el problema de los “baches” y plantear al presidente municipal de Cuernavaca un plan para reparar todas las hendiduras de las calles de la capital.
Las mesas de trabajo se suspendieron a raíz del incendio en el mercado “Adolfo López Mateos” pero insistirán en su reinstalación, informó Anselmo Delgadillo Saavedra, líder de la Confederación de Permisionarios, Transportistas del Estado de Morelos.