El alcoholímetro en Cuernavaca seguirá sin implementarse debido a que los “separos” (el lugar donde se traslada a los infractores) aún no cuentan con las condiciones óptimas para utilizarse, informó la regidora de Seguridad Pública, Tránsito y Patrimonio Municipal, Gudelia Colín Romero.
“No contamos con un médico legista, rampas para las personas con discapacidad, ni con salas de espera para los familiares de los infractores. Se necesita también un aparato de la marca Dräger para detectar los grados de alcohol, el cual tiene un costo que rebasa los 90 mil pesos”, dijo la regidora.
Mencionó que después de recibir una recomendación de la Comisión de Derechos Humanos del estado de Morelos (CDHEM), se debían realizar mejoras (no especificó cuáles) para poder implementar el programa pero que hasta el momento no han concluido.
Por otro lado, añadió que hasta el momento no tienen reportes de accidentes o muertes provocadas por conducir en estado de ebriedad y que el alcoholímetro no se realiza con fines de lucro, sino para salvaguardar vidas tanto de conductores como de acompañantes.
“Estamos esperando las indicaciones del secretario del Ayuntamiento Samuel Sotelo para abrir las mesas de diálogo con todos los regidores y debatir la fecha de inicio del alcoholímetro”, puntualizó Gudelia Colín.