El regidor Eduardo Bordonave Zamora, quien encabeza la Comisión Reguladora para la Venta, Distribución y Consumo de Alcohol, informó que por falta de fundamentos legales no han podido revocar la licencia de funcionamiento del Bar Attico (donde se registró el asesinato de un alumno de la UAEM en septiembre del año pasado).
El munícipe explicó que la Comisión Reguladora no tiene facultades de investigación, por lo que tuvo que recurrir a la dirección de Gobernación del Ayuntamiento de Cuernavaca para que proporcionara información, y dicha dependencia argumentó que el negocio se encontraba clausurado; solicitaron el expediente de ese negocio y resultó que el Attico había sido verificado un mes antes de los acontecimientos y cumplía a cabalidad con lo que solicitaba la ley, es decir, que cumple con las disposiciones municipales. Sin embargo, se busca la revocación de la licencia por el homicidio que ocurrió en el lugar.
“Hemos estado en espera de que la Dirección de Gobernación nos proporcione información que nos dé los fundamentos legales para poder revocar la licencia, es decir, no podemos revocar la licencia cuando el lugar tenía todo en orden.
Tenemos un problema grave y por eso ahora modificamos la normatividad para que en caso de que ocurra un hecho similar, la licencia sea revocada de facto”, dijo el regidor.
Informó que el proceso en contra del bar Attico sigue abierto e insistirán ante la dirección de Gobernación para que aporte más elementos e, incluso, podrían fincar responsabilidades a los funcionarios que no actuaron adecuadamente.