El vicario de la Diócesis de Cuernavaca, Tomás Toral Nájera, dijo que más allá de ciertas disposiciones que tenga la iglesia católica hacia las autoridades, las visitas son de carácter religioso.
Castro Castro visitó el centro penitenciario femenil de Michapa para hablar de la reconciliación personal.
"Hay visitas programadas a lo largo del año, por ejemplo, en septiembre visitó el centro penitenciario de Cuautla, en la celebración de la virgen de la Merced, como patrona de los presos; ese día el obispo fue a celebrar una misa y animó a todos para confiar y que cada uno permita que la conversión llegué a su corazón", expresó Toral Nájera en la catedral de Cuernavaca.
De igual modo, agregó que el trabajo en los centros se sigue llevando a cabo con la participación de cada uno de los encargados, donde se hacen diferentes actividades en el mes de adviento, como retiros y eventos festivos, “para llevar vida a los reos” y que puedan reintegrarse a la sociedad.
Toral Nájera señaló que hay una estructura en los penales que permite a los equipos de pastoral penitenciaria hacer el trabajo con todas los cuidados posibles, y aquellos que se reúnen van en el sentido religioso porque la dinámica de plática es poca, ya que se busca, principalmente, ser buena noticia la asistencia del obispo en estos lugares.