¡Poninas dijo popochas! ¡Ya llegó su charro, reventando como siempre desde el más leído, mi lector. Ya sabanas que en el "papel" y virtual la estamos haciendo de jamón, hasta que truenen los engranes de las rotativas y hasta que se "congele" nuestra visitada página web.
La "calumnia" de hoy la dedico al albur, su majestad, el caliche, la jerga hablada en los círculos sociales "bajos", la neta de la patineta, el lenguaje de los círculos apabullados, vapuleados, "azorrillados", ¡como siempre! ¡Algo tenían que hacer! El punto era encontrar una forma humorística que los liberara de la constante y permanente frustración propia de los que menos tienen. Desde aquellos gitanos, judíos, españoles, que llegaron a nuestro país, precisamente a la ciudad de la nube gris y que buscaban sobrevivir, y que finalmente hoy en día conocemos de parte de muchos de ellos un sagaz legado económico, desde vendedores de tela, aboneros, "vende lámparas" ¡en fin! de "Toño Tigre" mercaban estos valedores, quienes justamente junto con los indígenas náhuas y otomíes le "hallaron" a una nueva forma de lenguaje a través del cual podían pasar "desapercibidos" un código lingüístico especial para que se les pudieran ir riendo a la Guardia Nacional (la de antes eh, mi lector, no se caliente garnacha).
Y es entonces cuando decían "almejas porque por ahí anda la chota (policía) y nos van a querer hacer una fiesta" ¡agujetas! porque los acólitos del diablo, ya nos estuvieron "licando" (observando) y nos van a dar "tarisvel" (carcel).
Esta fue una clara muestra del caló utilizado en aquellos tiempos, en aquellos "trajeados" "cuarentas". Pero desde luego, el código ha sufrido constantes cambios dependiendo de la época.Luego entonces, en la actualidad, la misma idea cambiaría por: ¡buzos caperuzos!, porque ahí anda la "tiranía" (policía) y nos van a dar Patricio ¡truchas" porque ya se la sándwich, ¡chico, mamá, y papá! porque los "tiroles"(policías) ya estuvieron "picando la salsa" y ya nos "campanearon" cuya traducción literaria es: "Cuidado porque la policía nos puede arrestar, estén muy pendientes porque de no ser así, nos arrestan y tendremos que seguir un proceso jurídico que nos podría llevar hasta la cárcel. Hay que decir también que la iglesia católica, siempre "observadora" de alguna forma, con sus habituales represiones influyó para que el albur mexicano se magnificara. Habrá que recordarle a su majestad que la propia represión sexual en aquel entonces motivó la magnificencia de una proposición expresamente sexual con un metafórico juego de palabras con creativos "dobles sentidos." Sin duda alguna, qué bueno que existe el albur mexicano, porque de no ser una realidad, hoy en día acabaríamos expresando nuestra frustración a través de auténticas y verdaderas groserías para escapar de la censura, o disfrazar de alguna forma la represión de cualquier tipo de la que ha sido presa constante nuestra sociedad civil. ¡Ya sábanas paquetes de hilo!
El sexo es malo! ¡acabemos con ese estigma! ¡chale! hasta cuándo cambiarán tan fatídica apreciación los pulcros conservadores (no los que usted se está imaginando mi brother eh, que quede claro) ¡la cantaleta de siempre! por ello, encontramos a tanto torcido por ahí. Acuérdese que la prohibición paradójicamente provoca lo contrario, de ahí el porqué de tanta perversión en el campo sexual. Aunque en realidad brothers, no se sabe exactamente cuándo es que surge el albur mexicano y el caló, pero estos verdaderos "agasajos" creativos, mi lector, son un auténtico legado evidentemente, un regocijo de la desinhibición. No olvidar a los "carperos" que según este su mafufo escritor fueron los mejores actores que ha dado "la gran Tenochtitlan". Como no recordar al "palillo", con sus constantes mofas al gobierno en curso. ¿Qué tal "Tin Tán", el prototipo del "Pachuco" (pachuco era el término que se utilizaba con los inmigrantes que llegaron de la ciudad capital de nuestro hermoso estado de Hidalgo, de ahí el nombre). No acabaría de seguirles "pasando corriente" cuates lectores… me retiro diciéndoles que este regocijo lingüístico continuará siendo el "modus vivendi" de nuestro folklórico pueblo mexica. Ahí se las dejo de tarea. Se despide de ustedes su reporñerazo favorito.