En conferencia de prensa, Andrea Acevedo, representante en Morelos de la agrupación civil, recordó que el próximo 28 de mayo es el Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres, y en este marco expuso la posición e exigencia a la autoridad para que haya mayor educación sexual laica y científica en las escuelas y campañas de difusión dirigidas a mujeres adolescentes.
Con el lema de “Ser madre no es un juego de niñas”, la Red expuso que a nivel nacional se llevan a cabo varias acciones dirigidas a prevenir embarazos en mujeres adolescentes. Destacó que este fenómeno no sólo implica un importante riesgo de salud para las jóvenes sino también rasgos de inequidad social.
“Ser mujer y ser adolescente constituye una doble desventaja en la actual realidad social de México y de nuestro Estado. La cultura machista y misógina que todavía predomina y que incluso es fortalecida por nuestra sociedad y por nuestras autoridades, dificulta el avance de la sociedad morelense hacia una mayor equidad en todos los ámbitos de la convivencia cotidiana.
A las mujeres todavía se nos enseña, desde nuestra más tierna edad y de manera sutil y cotidiana, que nuestra realización personal más conveniente debe estar enfocada en la maternidad, el cuidado del hogar y la satisfacción sumisa de las necesidades del hombre como prioridad, dejando de lado y como aspecto secundario todo lo relacionado con el crecimiento profesional y los múltiples factores que contribuyen al desarrollo de una personalidad equilibrada y saludable.
Esta cultura machista, así como la grave ausencia de programas educativos y de salud en materia sexual con una visión laica y científica, que llegue a todos los sectores de la población pero sobre todo al conformado por adolescentes y jóvenes de ambos sexos, genera una serie de graves problemas sociales, entre los cuales destaca la continuación de embarazos en mujeres adolescentes”.
Destacó que también es evidente y grave la falta de acceso adecuado y oportuno a los múltiples métodos anticonceptivos, pues “constituye otro factor que exhibe la irresponsabilidad de las instituciones en la materia”.
Refirió que de acuerdo con cifras oficiales, una de cada 12 mujeres entre 12 y 19 años de edad tiene al menos un hijo nacido vivo. “El incremento de madres adolescentes genera efectos adversos en su calidad de vida, puesto que sus aspiraciones personales y profesionales corren alto riesgo de quedar truncas, además de que sus hijos o hijas sufren las consecuencias de tener madres en situación de vulnerabilidad y corren el riesgo de repetir el mismo esquema.
Los embarazos en adolescentes que no llegan a término también son fuente de preocupación, pues además de que en el estado de Morelos el derecho a decidir esta invisibilizado y atropellado por nuestros legisladores, las circunstancias de quienes se enfrentan a esta situación son adversas como la falta de recursos económicos o el apoyo necesario para acceder a servicios de salud adecuados, por lo que el riesgo de morbilidad y mortalidad aumenta”.
Destacó que el municipio donde la incidencia de embarazos en adolescentes es mayor es Axochiapan con un 8.5%.
Por todo lo anterior, la organización social exigió que en el sector educativo, se implementen estrategias de educación sexual laica y científica para las y los adolescentes.
En salud demandaron que se garantice el acceso, el abasto y disponibilidad de los diferentes métodos anticonceptivos para dicho grupo de la población de manera especial.
Por otro lado Nadxiielli Carrano Lechuga, coordinadora del Comité contra los Feminicidios en Morelos, lamentó que en el programa presentado por el actual secretario de seguridad pública al Congreso local, en su reciente reunión, no se haya contemplado al menos alguna estrategia para prevenir los feminicidios.