Luego de que la sección 19 del sindicato magisterial redujo el número de comisionados de 228 a 100 y planteó que la autoridad educativa debería hacer lo propio, el directivo del IEBEM expuso que “en el instituto no hay comisionados, los hay en el sindicato porque son maestros que hacen labores en otra área, para su organización, nosotros lo que tenemos es personas que sí trabajan en el IEBEM y que ellas mismas han pedido que se les conserve su plaza docente para no perder las prestaciones o derechos que son mayores y siguen acumulando la antigüedad… Pero las podríamos cambiar, en ese caso, ellos son quienes tendrían que hablar con su sindicato o con sus agremiados para que vean cómo está la situación, porque serían ellos los que resultarían en un momento dado afectados. Yo no tengo ningún inconveniente en cambiar sus claves”. Destacó que serían alrededor de 60 las personas que se encontrarían en esta condición, y no 200 como lo habría señalado el SNTE.
Sedano Reynoso manifestó que existe la disposición de reducir el gasto corriente, y ya se trabaja en ello, pero comentó que antes tienen que terminar proyectos. Por ejemplo mencionó el de digitalización, en el que se trabaja con los archivos más grandes, como el de personal que abarca 24 mil trabajadores. Es decir la historia de toda la vida laboral de cada uno de ellos, porque el archivo actualmente es una locura, tienen que buscar en documentos, entonces ya digitalizado podrían localizarlo casi de inmediato, a través de algunas claves. Además se digitalizará el archivo de servicios escolares y el de carrera magisterial.
Apuntó que también se trabaja en un proyecto importante de digitalización de nómina para depósitos bancarios y que todas las incidencias puedan ser consultadas y registradas por internet.
Tras dejar en claro que no tocarían a los sindicalizados, sostuvo que analizarán en qué proporción podrían recortar personal. Apuntó que se analizará de qué manera se puede fortalecer las oficinas regionales para que dejen de ser sólo pagadurías o distribuidoras de libros de texto y den todos los servicios a los maestros, similares o iguales a los que se dan en oficinas centrales y que no se tengan que desplazar hasta Cuernavaca.