“Lo que más lastima a un pagador de impuestos, es el hecho de que haya otros que no paguen, estos regímenes a los que se alude (repecos e intermedios), están en la parte final de la red y no hacen contacto con otra parte que obligue al cumplimiento de las obligaciones fiscales. Entonces no es un asunto de reforma contra los repecos, desde mi punto de vista, sino es un efecto de que se rompe la causa y efecto, lo que se intenta con la reforma fiscal es emerger lo más posible la economía subterránea”, explicó el funcionario.
Es decir: “…a estos dos regímenes se les dan obligaciones de contribuyentes normales, entonces se va a dar el efecto de deducción y acumulación, donde emergerán todos los actores de la relación tributaria fiscal, pero al final yo creo que no van a pagar más porque además de que tendrán un periodo de tregua por 10 años para ir pagando paulatinamente el Impuesto Sobre la Renta, no pagarán el IETU como lo venían haciendo los contribuyentes normales, ni el Impuesto al Depósito en Efectivo. Y en cuanto al Impuesto al Valor Agregado los repecos no son quienes lo pagan, sino el consumidor que compra el servicio o producto”.
En cuanto a la idea que tienen los ciudadanos y los pequeños y medianos empresarios respecto a que esta reforma no incluyó en su base tributaria a los comerciantes informales, Hernández Salgado señaló: “definitivamente ese es un gran reto, no del país, sino de cualquier economía del mundo, el lograr que la economía informal aporte lo que debe aportar al gasto público, pero creo que se está iniciando una labor para lograr que poco a poco la gente informal entre a la formalidad. Pero, repito, es un gran reto para cualquier gobierno”, finalizó.