La titular de la Contraloría municipal, Karla Aline Herrera Alonso, indicó que en el cierre del año por cuanto hace a las actividades de la Contraloría existe un dato relevante, estadísticamente que indica que más del 50 por ciento de las denuncias que presenta la ciudadanía se deben a mala atención y no a actos de corrupción.
“Las áreas de las que derivan las denuncias, en general son las que tienen contacto directo con la ciudadanía y las áreas que poseen responsabilidades económicas, así como de supervisión e inspección”, dijo.
En ese sentido, Herrera Alonso abundó que la administración que encabeza el presidente Jorge Morales Barud, utiliza como herramienta principal el Código de Ética, que es una forma de atender la causa para no padecer las consecuencias.
Aseveró que al día de hoy, el gobierno municipal a través de la Secretaría de Administración, Derechos Humanos y la Contraloría, ha capacitado alrededor de mil 500 servidores públicos con el objetivo de dar un mejor servicio a los cuernavaquenses; incluido el personal de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
“Tratándose de esa área, la Contraloría no tiene competencia, pero gracias a la disposición y a la coordinación que hemos tenido, hemos atendido con prontitud los casos. Finalmente, no podemos dejar esto en un conflicto, sino tenemos que dar un resultado en donde se advierta que aquel que funja como mal servidor público sea sancionado”.
En otro contexto, la contralora resaltó que al finalizar el primer año de gestión de la presente administración, dio fin a las auditorías internas realizadas a las secretarías que integran el ayuntamiento, las cuales en su mayoría se encuentran en la etapa de solventación.
Con lo anterior, aseveró que actualmente se prepara un diagnóstico para corregir y prevenir omisiones en relación con la dinámica de transparencia y la rendición de cuentas que establece el edil Jorge Morales Barud.