Lo anterior, no era más que contratar una nueva deuda por el monto antes mencionado, al "vender" parte de la deuda contratada anteriormente, de más de cinco mil millones de pesos, a inversionistas de la Bolsa de Valores, a través de un Fideicomiso.
En días pasados, el titular del Poder Ejecutivo, Graco Ramírez Garrido Abreu, a través de un intermediario, el secretario de Gobierno, Matías Quiroz Medina, empezó a cabildear al interior del Congreso del estado, la posibilidad de bursatilizar la deuda de la administración estatal, a fin de resolver la crisis financiera por la que actualmente atraviesa y que ha impedido el desarrollo de obras públicas en la entidad.
Dicha información fue confirmada por algunos diputados locales, incluso coordinadores parlamentarios, que prefirieron no se publicaran sus nombres ante la negociación que se da para la aprobación del Paquete Económico 2015. No obstante, confirmaron que la solicitud, que se incluía dentro del presupuesto de Egresos 2015, fue rechazada.
La idea, según se dio a conocer, era que el Ejecutivo "vendiera" parte de la deuda actual, a través de la bursatilización, y mediante un Fideicomiso se invirtieran en la Bolsa de Valores, de esta forma inversionistas comprarían la deuda y la pagarían a los bancos donde el gobierno del estado contrató los créditos.
Así, la administración estatal contraería una nueva deuda por tres mil millones de pesos, pero esta vez la pagaría al Fideicomiso que negoció con la Bolsa de Valores.
Sin embargo, la intención resultaba totalmente improcedente, tanto legal, social y sobre todo económicamente, puesto que el gobierno del estado comprometería ingresos propios, como son derechos, servicios públicos e impuestos que cobra en el estado, ya que las participaciones federales están comprometidas desde el año pasado, cuando contrató una deuda por dos mil 806 millones de pesos y reestructuró más de mil millones de deuda, lo que suma más de 5 mil millones de pesos.
"Cuando revisamos los términos en que venía ese planteamiento...no estaban comprometiendo participaciones, comprometían activos e ingresos propios, porque las participaciones federales ya están comprometidas y eso por un lado lo hace complicado, y es prácticamente imposible que la Bolsa pueda aceptar un impacto de esa naturaleza, pero por ningún motivo nosotros íbamos a transitar con este planteamiento, es una nueva deuda, es una sinrazón, es increíble que lo quieran hacer", manifestó uno de los coordinadores parlamentarios que confirmó la información.
Es que, de autorizar tal situación el Congreso del estado estaría aceptando que se comprometan tanto ingresos propios como participaciones federales.