La dependencia estatal se coordinó para esas labores con la Comisión Estatal del Agua, a fin de liberar ese espacio y permitir el cauce natural de la barranca, el cual se mantiene obstruido.
Catarino Urióstegui Álvarez, jefe del departamento de emergencias de la Coordinación Estatal de Protección Civil, detalló que este problema se agudizó el año pasado, cuando se presentó un fuerte socavamiento en los cimientos de dichos inmuebles, por lo que existe el riesgo de que puedan colapsar, ya que únicamente están soportados por una plancha que construyó la empresa “Coppel”.
En ese sentido, comentó que recibieron la instrucción del coordinador estatal de Protección Civil, Carlos Mandujano Vázquez, para que fueran notificados tanto los locatarios, así como el gerente de la compañía “Coppel”, que se encuentran en una zona de alto riesgo y por seguridad tendrían que ser desalojados para salvaguardar la integridad física de los trabajadores y de las personas que acuden a realizar sus compras.
Finalmente Urióstegui Álvarez refirió que se ha obtenido una respuesta favorable, ya que de los ocho negocios que fueron notificados solamente falta uno por ser liberado.
Resaltó que sólo falta delimitar la zona federal y según personal de Conagua, se requiere liberar cinco metros de cada lado de la barranca, para posteriormente encausar las aguas de manera adecuada.