En su convocatoria para elegir su candidato para el 2012, el PAN estableció que si en la elección interna del 5 de febrero ningún precandidato obtiene más del 50 por ciento de los votos o bien 37 por ciento de los sufragios con más de 5 puntos de diferencia sobre su más cercano competidor, habrá una segunda vuelta entre el primero y el segundo lugar el 19 de febrero.
Acción Nacional, se entiende, tendrá candidato formal a la Presidencia de la República hasta el 18 de febrero.
Tras el pataleo, las descalificaciones, la frustración, la candidata panista al gobierno de Michoacán, Luisa María Calderón, una vez valorada la abismal desventaja, reconoció el triunfo del candidato priista Fausto Vallejo Figueroa. El reto lo lanzó: que "el próximo gobernante reconozca el diagnóstico que hay en el estado en materia de seguridad y comience a proponer soluciones".
Josefina Vázquez Mota apenas declaró que intentará que la dirigencia nacional busque una candidatura de unidad y adelante la decisión. Su valoración sobre la alianza que ya se concretó entre el Partido Revolucionario Institucional, Verde Ecologista y Nueva Alianza, le mereció una reflexión que asesta en contra de quien sabe su enemiga: la dirigente del SNTE está en su derecho de ir junto con el PRI en la elección de 2012, mientras que a ella, como candidata, la alianza que le interesa es con todos los maestros del país.
“Renuncié para ser presidente, no para encabezar una candidatura ‘testimonial’ ni para ‘ser pararrayos’ de Josefina Vázquez Mota”. Con esa carta, defendió Ernesto Cordero los señalamientos que en las más recientes semanas se le han hecho llegar en el sentido de ser último en las encuestas; su posible declinación también es una constante, es el sentir en los cafés, comedores, medios de comunicación.
El mismo Cordero reconoce ese lugar en los análisis, sin embargo dice que la “población objetivo” no es la sociedad en lo general sino los integrantes del panismo, que a fin de cuentas son quienes habrán de tomar la decisión. Una defensa muy atacable: ¿Qué esperar de un candidato que puede ser bien visto al interior del grupo de poder y poco aceptado hacia la visión ciudadana?
Hace tres días, Santiago Creel Miranda -hacedor de sustantivos- tiene "sospechosismo" al referirse a la investigación y arraigo de su estratega Jorge Álvarez Hott, quien se desempeñó como subsecretario de Comunicaciones y Transportes durante el gobierno de Vicente Fox.
Álvarez Hott fue acusado en juicio mercantil de haber actuado a favor de la telefónica Movistar y se encuentra sujeto a arraigo. Me parece "muy sospechoso" –dijo- que a dos días de que se emita la convocatoria del PAN para elegir candidato a la Presidencia de la República, se detenga a mi representante ante el partido.
Cada uno está cosechando lo que sembró. Josefina Vázquez Mota habrá de tener frente a sí, de lograr la candidatura, la operación política, territorial, económica, de arrastre, capacidad de bloqueo, inclusive doctrinal, de los leales a Elba Esther Gordillo.
La revista Proceso, el 18 de julio de este año, en charla con Álvaro Delgado, publicó: “La respuesta de Vázquez Mota y su afirmación de que participó sólo en negociaciones ‘muy generales’ con Gordillo en la fase de la campaña, y no en la entrega de cargos en el gobierno, como lo expuso en la entrevista publicada esta semana en Proceso, representan no sólo un deslinde sino la imputación inequívoca de que Calderón es el único responsable de ese pacto que sigue teniendo plena vigencia”.
“Identificada por Manuel Espino, presidente del PAN en 2006, como la principal operadora de Calderón para entregarle a Gordillo más de 40 candidaturas de ese partido a diputados y senadores, Vázquez Mota aclaró inclusive que ella en su carácter de secretaria de Educación sólo formalizó el nombramiento como subsecretario de Fernando González, yerno de Gordillo, que era parte del pacto”.
El 24 de octubre de 2005, Santiago Creel y Alberto Cárdenas reconocieron el triunfo del ex secretario de Energía Felipe Calderón Hinojosa, para ser el candidato del Partido Acción Nacional (PAN) a la Presidencia de la Republica en 2006.
A pesar de ser el enviado de Los Pinos, impulsado y respaldado por la dirigencia nacional encabezada por Manuel Espino, los resultados le dieron 51.79 por ciento de la votación en las tres etapas del proceso electoral panista al hoy Presidente de México.
Un largo paso por el Senado de la República –espacio de privilegio dicen los expertos- le significó a Creel una tediosa espera que puede cristalizarse o en su caso escapársele por segunda ocasión y consideramos última.
Los cargos públicos que ha ocupado Ernesto Cordero, aunque trascendentes e importantes, siempre han sido bajo el reconocimiento, confianza y manto protector de Felipe Calderón. Varias direcciones, direcciones generales y administrativas, una Subsecretaría y la titularidad de Hacienda, le significan una carrera tal vez suficiente para la aspiración Presidencial, pero la misma cercanía al presidente Calderón, lo hacen vulnerable.
Acción Nacional puede tener muchos defectos pero su democracia interna ha sido efectiva y congruente. Vicente Fox, como estratega y conocedor de la mercadotecnia, se metió hasta la cocina de los blanquiazules; no solamente conquistó a sus líderes, pese a quien le pese, le arrebató al PRI la Presidencia de México.
Felipe Calderón, a contracorriente, con el Presidente de la República jugando las contras, con un presidente de Partido con otro ánimo, y por si fuera poco, con el ex secretario de Gobernación como contrincante, resultó triunfante.
Hoy, Vázquez Mota y Creel Miranda son los opositores a la fuerza presidencial. Calderón, puede ser víctima de los mismos que hicieron ganar a Calderón.
Para el lunes es compromiso compartir con nuestros lectores la experiencia del encuentro, el primero de tres, entre los personajes del panismo nacional.