Pero entre otros efectos negativos también debería contemplarse la forma en que se operan los operativos contra los conductores que van al volante después de ingerir bebidas alcohólicas (el famoso alcoholímetro) que en varios municipios se ha convertido en una fuente de recaudación más que de prevención.
La imagen que Morelos ofrezca a los visitantes es decisiva para impedir un desplome de la actividad económica en lo que resta del año y, como siempre se ha dicho aquí, todos los habitantes debemos participar, porque el beneficio será general, igual que el posible daño que puede evitarse.