Los dos grupos que se disputan el poder en Xoxocotla hicieron sentir su presencia ayer en dos manifestaciones que tuvieron fines muy distintos, pero con el mismo resultado: la afectación a terceros.
Es necesario lanzar un llamado a la civilidad a fin de que la población de Morelos deje de ver al recién creado municipio como fuente de conflictos, porque eso en nada abonará al desarrollo de una población que se ha quejado del atraso y marginación que padece, pero que ahora parece alentar.
El cierre de calles y carreteras daña gravemente a la economía y sí esa se convierte en su única forma de resistencia, más temprano que tarde los vecinos de Xoxocotla se verán excluidos de cualquier avance y darán la razón a los detractores de la creación de ese municipio.
Por el contrario, encuadrar sus reclamos dentro de los caminos institucionales sentará un precedente que terminará por beneficiar a todos los que se identifican con el nuevo ayuntamiento.