La Universidad Autónoma del estado de Morelos comenzó su camino hacia la regularización financiera luego de que el gobierno federal entregó los recursos para el pago de las nóminas atrasadas.
Por lo menos los próximos seis meses la institución dispondrá de dinero para operar con normalidad mientras emprende acciones para cubrir el déficit estructural de más de 800 millones de pesos que deberá enfrentar en 2019.
Los trabajos en caminados a encontrar recursos pasan por la dificultad de las políticas federales pero se han logrado avances notables que deben dar viabilidad a la institución, cuyos trabajadores enfrentaron en dos ocasiones en menos de un año la suspensión de sus salarios.
Esperemos que los sindicatos comprendan que la situación actual ya no es tolerable y participen en las decisiones para cuadrar las cuentas y garantizar el desarrollo futuro de la UAEM.