La Universidad Autónoma del Estado de Morelos anunció ayer el cese de dos de sus catedráticos que fueron acusados de agredir de distinta maneras a alumnas de la institución.

Aunque en los hechos desde el año pasado los docentes habían sido separados de sus puestos, la medida es histórica, primero porque parte del dictamen de una comisión de especialistas que analizaron ambos casos y en segundo lugar porque habla de que el acoso a las mujeres, en cualquier grado, ya no es tolerado no solo por las víctimas, sino por la propia institución.

Habrá que esperar el alcance que el movimiento ha tomado, lo cual quizá pueda medirse el próximo lunes, durante el paro de mujeres convocado para hacer visible la violencia estructural que ellas sufren.

Peo hasta al momento podemos decir que la mujer en Morelos ha alcanzado un grado más en la lucha por el reconocimiento efectivo de la igualdad que debe imperar entre hombres y mujeres.