A diferencia de las medidas que han tomado otros municipios o entidades del país, en Cuernavaca no se contempla la prohibición por decreto de espectáculos con música bélica, pues los organizadores han mostrado mesura ante la sugerencia del gobierno capitalino de no incluir a cantantes que promuevan letras con apología del delito.
La decisión del alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui, está alineada con la visión de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien ayer señaló que prefiere que sea a través de la educación y de la formación como la sociedad vaya haciendo a un lado el gusto por este tipo de géneros musicales.
Desde el gobierno federal han mostrado apertura a estados y municipios para que –en el ámbito de sus atribuciones– decidan qué es lo mejor para sus sociedades, aunque la sugerencia es siempre poner por delante la cultura de la paz.
En Benito Juárez, Quintana Roo; Chihuahua; Tijuana, Baja California; Nayarit y Michoacán ya han decidido incluir prohibiciones en alguna de sus legislaciones para la presentación en espectáculos públicos de grupos musicales que tocan los denominados "narcocorridos".
Querétaro, Jalisco, Aguascalientes y Estado de México también analizan tomar medidas sobre esta situación, que en las últimas semanas ha sido parte del debate nacional.