En el proceso electoral de 2012 están en juego asuntos que tienen que ver con la necesidad de mejorar el desarrollo y el bienestar social, el deterioro de la vida pública y el orden jurídico, la necesidad de contar con un entorno propicio para la inversión y la generación de empleos, con el acceso a la salud pública, y especialmente, a una educación de calidad en términos de igualdad y equidad. La tarea es ingente porque, en una palabra, hablamos del futuro inmediato de la nación: o seguimos como hasta ahora, o divisamos alguna luz en el horizonte.
El calendario electoral para la elección presidencial está en marcha y sin lugar a dudas, en el desarrollo de sus campañas proselitistas frente al electorado, los aspirantes a la Presidencia de la República tendrán como componente de sus líneas discursivas el capítulo educativo. La discusión y el debate sobre este sector, clave para el desarrollo sostenible de cualquier nación, está abierto. Por esta razón, en este espacio, como lo señalamos en nuestra última entrega, evaluaremos las propuestas e iniciativas que al respecto planteen los aspirantes a la Presidencia de la República.
De la maquila a la sociedad del conocimiento
“México la gran esperanza”, de Enrique Peña Nieto, aclara su autor, no es propiamente un plan de gobierno. Aunque se trata de una obra cuyo núcleo –en lo general- se nutre de ideas y reflexiones del ex gobernador del Estado de México respecto a los desafíos y oportunidades que implican las problemáticas que enfrenta el país hoy en día, se puede decir que el apartado dedicado a la educación, ciencia y tecnología (“Construir una sociedad del conocimiento”), es –hasta el momento- la visión más amplia que proviene de los aspirantes a la Presidencia en la materia.
El planteamiento de Enrique Peña Nieto es pasar de una economía maquiladora a una del conocimiento como eje estratégico para que México pueda transitar exitosamente del siglo XX al siglo XXI, sustentada en tres ejes que quedan plenamente identificados: 1) consolidación de la educación básica con calidad equitativa; 2) universalización de la educación media superior y ampliación de la cobertura y calidad de la educación superior; 3) aunadas al desarrollo de un proyecto común en los campos de la innovación, ciencia y tecnología y una política industrial pragmática, “que trasciendan la alternancia sexenal del poder político”.
Peña Nieto plantea la necesidad de invertir en el desarrollo de la ciencia e innovación tecnológica como una fórmula para que amplios sectores de la población alcance mejores servicios en salud, educación, bienes de consumo; elevar la competitividad del país en el concierto mundial y el nivel de vida de los mexicanos,
Al respecto, el diagnóstico que se tiene hoy en día sobre el desarrollo de la ciencia y la tecnología es desalentador. Y lo está en gran medida por la falta de inversión del Estado mexicano para alcanzar el umbral del 1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), que establece la Ley de Ciencia y Tecnología. También por una política de cancelación de plazas y vacantes en los institutos de investigación federales, que inició prácticamente en el gobierno de Vicente Fox y continuó con la administración del presidente Felipe Calderón, para absorber el capital humano que se forma en las instituciones de educación superior y centros de investigación del país o en el extranjero.
En el país, concluyen su preparación doctoral alrededor de tres mil estudiantes, y de ese universo, cerca de mil consiguen en empleo para continuar con sus trabajos de investigación. Y por cada mil jóvenes que se pierden en un año, el país tiene un quebranto de más de dos mil millones de pesos. A estos factores se suma el poco interés de la iniciativa privada por invertir en estas áreas, al considerar que el sector no es polo de desarrollo que genere ganancias en el corto plazo. La comunidad científica, en diferentes foros, se ha pronunciado por una política integral de Estado en la materia.
Educación básica de calidad y más equitativa
Profesionalización, capacitación y actualización continua del magisterio, esquemas de remuneración vinculados al desempeño de los estudiantes en cuanto a habilidades y competencias; fortalecimiento del financiamiento de las evaluaciones; diseño de programas para reducir la brecha digital; aumento de gasto por estudiante, articulación de esfuerzos entre la federación, entidades federativas y municipales, transparencia y rendición de cuentas, son -entre otros- algunos de asuntos sobre los cuales Peña Nieto considera se debe de avanzar.
En efecto, en la actual coyuntura, la educación básica es sector más afectado tras la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2012. Los recursos son insuficientes porque se recortaron los recursos para equipamiento tecnológico. El programa de inglés, formación continua de maestros, Escuela Segura, Escuela de Calidad, Escuela Siempre Abierta también perdieron recursos, que ponen en entredicho la viabilidad de cumplir las metas sexenales para estos rubros.
En total a la educación básica le redujeron cerca de mil 126 millones de pesos respecto a los recursos de 2011. Y se requerirá, al menos, mil millones de pesos adicionales para consolidar los programas de ese nivel si se quiere arribar a las metas sectoriales al cierre de este sexenio. El programa de Formación Continua de Maestros disminuyó 182 millones de pesos. Para tecnologías educativas se aprobaron tres mil 100 millones de pesos para el equipamiento del Aula Base Telemática y mil 800 millones para Habilidades Digitales para Todos.
Todo proyecto nacional, necesariamente, debe de estar sustentado en un plan de obra educativo que en prospectiva identifique los bienes y servicios que requiere la educación. Implica también tomar en cuenta el impacto que éstos tendrán, por ejemplo, frente al crecimiento poblacional en edad escolar; la probable extensión de los grados escolares obligatorios, el aumento de la matrícula en la educación media y superior, o bien, a la ubicación de tecnologías de la información y la comunicación emergentes que revistan mayores beneficios para la práctica docente.
El modelo educativo en educación básica, en ese sentido, cuenta con un instrumento con metas y objetivos: la Alianza por la Calidad de la Educación (ACE), que plantea un panorama y una visión clara de cada uno de los factores que gravitan en los resultados educativos, y que por lo tanto, deben de ser atendidos de manera integral. De eso continuaremos hablando en nuestra próxima entrega.
Alrededor del País
Mujer del año 2011.- Nuestra más sincera felicitación a Yoloxóchitl Bustamante Díez, directora general del Instituto Politécnico Nacional (IPN), por obtener el premio La Mujer del Año 2011. Año con año lo otorga el Patronato Nacional de la Mujer del Año A.C. a las mujeres que destacan por trayectoria profesional. Este reconocimiento, no hace más que corroborar que la doctora Bustamante es una voz copartícipe de las mejores causas sociales, siempre a favor del estratégico papel que desempeñan las mujeres en la vida pública del país, pero también en contra de las desigualdades y la violencia de género que lamentablemente aún prevalece en nuestra sociedad.
TSJDF.- En el marco de las reformas aprobadas por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) en febrero pasado, Édgar Elías Azar fue reelegido por el Pleno del organismo de justicia capitalino como titular del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF). Elías Azar ratifica de esta manera el buen desempeño que ha venido realizando. La contundente victoria que obtuvo frente a su contrincante, el magistrado Lázaro Tenorio, lo fortalecerá para negociar con la ALDF el tema de los presupuestos. Más aún, desde esa base iniciar la ruta para lograr la anhelada autonomía e independencia del Poder judicial capitalino.